La Guerra de Quito.
CAP. V.-Cómo el visorey partió de TúmDer_
para la cibdad de Sant .Ll:liguel, yendo execu–
tando las ordenanzas, por lo cual mostraban
los del Perú gran sentimiento.
A
LLEGADO,
pues, el visorey Blasco N úñez Vela al
puerto de Túmbez acompañado de Francisco Ve–
lazquez Vela N uñez, su hermano, y del capitan Diego
Alvarez de Cueto, su cuñado, y de otros caballeros y
criados suyos, entendió luégo, como hemos dicho, en
}a ejecucion de las ordenanzas, enviando sus manda-
mientos, sin estar recibido·por visorey, para que todos
le toviesen por tal, pues S. M. era dello servido; man–
dándoles que no sacasen ningun tributo demasiado á
los indios, ni les hiciesen ninguna fuerza ni mal trata–
miento,
y
otras cosas, que aunque eran justas, se ha–
bían de mandar ejecutar con gran órden y templanza,
é
no tan severamente ni con tanta aceleridad; no em–
bargante que no era causa equivalente para que los del
Perú se levantasen. ·
En Túmbez, Diego Alvarez de Cueto y otros de
los que venian con él
y
de los que residian en el Perú1-
le .aconsejaban por entónces no ejecutase las leyes, ni
entendiese en más que asentar el audencia
y
ve(se