de la Exhorlacion
á
la
J-
irtud.
9
tierra
y
del agua en compua- es la misericordia de Dios :
y
cion
de
los
delo..~
; pues los no menos
lo
son todas las otras
Astrólogos dicen que es un pun- perfecciones suyas: de m nera
to
á
res.pecto del cielo. Lo qual que tal es su bondad , su benig–
demuestran
claram~nte:
porque nidad, su magestad, su rua ose·
estando el cerco del cielo re- dumbre, su sabiduria , su dul–
parddo
en doce
signos~
por
zura,
su nobleza, su hermosu·
donde
ao.dael
sol,
de qualquier ra , su
omnipotenda ,
y
tal
parte
de la
tierra se
ven
los seis tambien
su
justicia.
Y ac;i
es
in·
perf~ctamente;
porque la altura finitamente
bueno ,
infinitamen–
y
eminencia de la ierra no te suave' infinitamente amo:ro–
ocupa mas. de lo que ocupa ria so,
é
infinitamente amable,
é
una hoja
de
papel
ó
una tabla
infinitamente·
digno
di:
ser
obe–
que
estuviese en medio del
muG-
deddo, temido, acatado
y
re·
do , de donde sin impedimento verendado. De suerte
qu~
si en
se veda la mitad del cielo. Pues el corazon humano pudiese ca–
siendo el cielo
Empíreo.
q•1e
es her amor
y
tem©.r
infiniro,
y
e1
primero,
y
el mas
noble
cuer - obediencia
y
reverencia infini–
po
del mundo , de tan
inesti- ta, todo
esto era debi·do ea
l·ey
mable
grandeza sobre to s los de justicia
á
la di-gnidad
y
ex:–
o.tros cuerpos ; poli' aqui
en- celencia de este
Señor.
Porque
tiende (dice Santo Tomás) (a)
si
qlli,Jnto una persona es mas
como Dios ,
que sin
ingu
a
1i -
excelente
y
mas
alta ,
tanto
se
mitacioo es el primer o.-,
y
el le debe mayor
reverencia ;
ne·
mayor
y
el
mrjor
de todas las
ces:uiamente-
se sigue que sien–
cosas,
así espir itu1les como eor- do ·1a excelencia de Dios
infLii·
porales,
y
haced
)f
de eHas, ha ta ,
se
le ·debe
reverencia
infi–
~e
sq-brepujar
á todas
ellas
con nita.
De
don~e
se in·nere
que
Infinita
grandeza; no
en
quan- todo lo que falta
á
nm:stro all}Or
tidad (porque no es cuerpo)
ú-
y
reverencia para llegél'r
~esta
no
en
la
excelencia
y
aoblc:.'za de
medida,
falta
p~ra
lo que
se ,de–
su per '."eclisimo sér.
be á la
(:iignidad
de esta gran·
Pues desceadie9do ahora
á
deza.
nuestro
proposito,
por aqui po·
"Pues siendo esto ac;i;
&
qué tan
drás en. alguna manera entender grande es la
obligadon
que
no~
quales
sean
las
perfecciones
y
pide solo este titulo
(aunque
grandezas
de e5te
Señor, porque mas
no
hubiera) ·al amor
y.
tales es necesario que sean '· qual obediencia de este Señor?
t
Qué
es
st1
mesmo sér. Asilo confiesa ama quien á
esta
bondad no,
el
Eclesiástico
(b) de u
'.niseri-
ain1
~
i
Qué
leme
quien á
esta
cordia ,
diciendo :
Quán grande Magestad no
teme~
i
A quién
sea el sér
qe
Dios ',
tan grande sirve
quien
á
este Señor no
sir~
B
Vt1
(a)
Sanct. Tbom.ibid. ,
(b)
EccJ.,,,.
)
I