'30
Libro
primero
caoo en que
él
se deleyta. Asi
contrario
la mesma hermosura
y
lo
ll~ma
S. Agustín , escribiendo dignidad de la virtud alegra
y
sobre el Génesis , donde dice (a): consuela
á
los bueno.s; como cla·
El alegria rle la buena conciencia
rament.e lo significó el Profeta
que
hay
en e.l bueno, paraíso
es.
David , quando dixo (c).: Los
Por donde la Iglesia en aquellos juicios del Señor ( que son sus
que viven con justicia ' piedad
y
santos mandamientos ) son
ver.
templanza, convenient{fmente Je daderos
y
justificados en sí mes-
~
llama paraíso adornado con abun· mos ,
y
son mas preciosos
y
mas
dancia de gracias
y
de
Ú~stos
.de· dulces que eI¿anal
y
la miel. Y
ley tes. Y en el libro que trata de asi como en' tales se deleytaba
cómo
se han de
e~señar
los ig· él mesmo en la 1guarda de ellos;
núrantes ,
dice asi (b): Tú, que
como
él
lo
testificó
en
otro
buscas
el
verdadero
~escanso,
el
Psalmo,
diciendo (
d):
En
el
ca·
qual se promete
á
los Christianos mino de tus mandamientos, Se–
despues de la muerté; ten por . ñor, me deley té , así
como
en
c~erto
que tambien lo hallarás' to'das las riquezas
d~l
mundo.
entre las m¿lestias amarguísimas La, qual sentencia confirma. su
de esta vida , si amares los man-
hijo Salomón en sus Proverb10s,
damientos de aquel
que
lo prome ·
diciendo
(e):
Alegria es
al
justo
tió: porque en mn
y¡
p-uco
~spacio
hacer justicia: que es lo mesmo
verás por ex'periencia cómo son que hacer virtud ,
y
cumplir con
mas dulces los frutos de la justi-
las obligaciones que el hombre
cia
que los de la maldaJ :
y
mas
tiene sobre sí., La qual alegria
verdadera
y
dulcemente te ale-
aunque proceda de otras muchas
grarás de la buena conciencia causas, pero señaladamente
pro-
-
en medio de las tribulaciones,
~ue
cede de la mesma dignidad
Y
, de
la mala enTtr·e los deleytes. hermosura de la virtud: la qual,
Hasta
aqu~. so~
palabras
de San como dixo
Platón,
es de iaesti–
Agustin. Por' Jas
quales ·
enteñ-
~able
hermosura. Finalmente es
derás ser tanta la
ale.griá:
·~e
la
tan
grande
el fruto
y
gusto de la
buena conciencia, que asi como ' buena conéiencia , que en ella
la miel no solamente es
dulce,
pone S. Ambrosio en el libro de
mas hace tainbíen dukés las
co-
sus
oficios
la felicidad de los jus.
sas desabridas
con
que se
junta;
tos en esta vida ;
y
asi dice él:
asi la buena conciencia es tan Tan grande es el resplandor de
alegre , que hace alegres todas
la vfrtud , que basta para hacer
las molestias
d~
la vida. Y asi nuestra vida bienaventurada la
como diximos que la mesma fe<il-
tranquilidad de la conciencia;-
y
dad
y
enormidad del pecado ator·
la
~eguridad
de la inoct'ncia.
memaba los malos ; asi por el
Y asi como los Filósofos sin
·
.
,,
lum-
(a)
Cont.Man.t.2.c:.9.
(b)
Tom.4.f.
1.deCatecu.rudi'b.~.16.
in fine.
(c)
Ps•.18• .
'(d)
lb.
1'.
r8.
\e)
Prov_.
21.