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·
Libro ·primero
y
no
p~ra
su .bien. éomo si mas daré
á
l~
serpiente,
y
morderlos
cla
ramente d1xera:
T.rocar~e
ha
ba:
y
s1
fueren captivos
~
tierra
de
t.almanera la prov1denc1a que de sus enemigos, ahí mandaré
.,tema de .ellos , que yo, que an · al cuchillo,
y
matarlos ha:
y
tes-los
mua~a p~ra defend~rlos,
pondré mis
ojos
sobre ellos para
ahora
los mirare para cartigar-
su mal,
y
no para su bien. Hasta
los,
y
darles el pago que sus mal· aquí son
pal~bras
dt:'l Profeta.
dades mereceCl. Asi lo deC!aró Pues dime ahora,. ¿qué hombre
aun mas
expres.a~ente .
por el hay que leyendo esLas palacras,
Profota
Oseas '· d1c1eodo
(a): Yo
y
acordándose
q1-1e
son
de
Dios,
seré como polilla
de
Efra1m,
y y
viendo
guál
sea
esta:
.manera de
como
carcoma de Israél , para
p~oviJeucia
que él tiene de los
los ir castigando
y destruyendo,
malos, no se estremezca todo de
como se
destruye
la
ropa con
ver
quán poderoso euemigo tie–
la polilla. Y porque esta manera ne contra sí, el qual con
tan
de
persecucion parecía
prolixa
y
grande estudio
y
diligencia
le
blao~a
,
añade luego otra mas busque
y
l~
cérque,
y
le tome
acelerada
y
furiosa,
dicli:
a
:
'i
o
tod0s !os ca !llinos ,,
y
vele para
seré como leona
á
Efraim ,
y
su destruicíon
1
i
Cómo
tendrá
como cachorro de leon
á
Ju-
reposo? icómo comerá bocado
rlá:
yo
iré .,
y
os P.renderé,
y
qye
Qitn le
sepa, teniendo tales
los te maré ;
y
no hab á quiep ojos , tal furor , tal · perseguidor,
los libre de mis man
~.
Pues
q11é
y
tal · brazo contra sí? Porque
mayor miseria quü:res que
6:ita~
si tan grande mal es carecer del
Y no es
mtnos claro
te.
f
mo-
favor
y
proviuentia del Señor;
nio de
este lí nage
e
prcviden •
tqu~ato
mayor
lo
sná
haber
cía elque leemos en
el
Profeta
convt>rtido contra
sí.
las
~rmas
Arr.ós(b): en
d qual
despues de de
esta
mesma prov1deGc1a;
y
haber dicho Dios que babia de que Ja espada
que
estába
desen.–
meter
.á
esoada todos
fos mal<Js
bay
nada contra sus eoemigos,
se
por los pecados de su avaricia, vuelva contra ti;
y
los ojos que .
'J.·ñade
luego ,
y
dice
asi: Y
110
velaban para
ddenderte,
velen
piensen ·escapar de mis manos ahora para dest ruirte;
y
el brazo
los que
huyen.
Porque si de \cen- que era para sostenerte,
sea
abo-
) dieren hasta el infierno, de alli
ra para der rtbarce;
y
el corazon
los
sacará
.mi mano (e):
y
si
su· que pensaba sobre
ti
peosamien·
hieren
á
lo
alto,
d,e ·
allí los
dei>
to de paz y de amor, pit-nse aho·
1
ribaré :
y
si síibi·· ren
á
lo
mas
ra peusamic-ntos de
afliq:ion
y
alto <lel
monte
Carmelo, ahí los
~fo l úr;
y
el
que
babia de ser
tu
bu. caré
y
los tofl!aré :
y
si se escuao , tu sombra
y
tu amparo,
escondieren
de mis
ojos en el venga
á
ser ahora polilla para
profundo
de
la mar , ahí. man.
c;omert~,
y
lcon para d speda-
···
·
zar·
(a)'
Ossece.
5.
(b)
Amos 9.
(e)
Ps.
138.