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mina, pierde con el impuesto, con lo cual mas pronto
lle·
gará a arruinarse. Esto puede parecer correcto a la comi–
sion, per0 está léjos de serlo para los principios mas tri–
viales de-la cieBcia econ6mica.
1
..
a comisiona-firma ql:le el mejor impuesto es aquel «que
meJ@r permite
e-1
desarrollo de los elementos del poder pro–
ductor en las mismas relaciones recíprocas que si no exis–
tiese~),
i que esto se obtiene con el impuesto i:g1rnl: justo,
perfecta-mente justo; pero l1a comision olvida que en las
2JO·
nas
·que va a comprender el impuesto de
'1'1~e
se trata,
e~is
tia un
11éjihnen
de mo:nopolio que va a 1<ilesapareoer, i en·
Mnees s-u C0nchi1si0n tilebiera haber sido enteramente al
contrario, porque las relaciones de existemcia en que se
ha~
llaban las industrias son mui diversas.
La e0-mi.sion adiirma que Tarapacá pToduce sailirtre sufi–
ciente para abastecer el total consumo del artículo, i que
p0r
t a¡nmo si por el impuest0 igual tienen qlll.e
desapallece~
~©S
illljemios ex istentes en otros puim..itos, es !lllecesarie> aceptair
.esa
Jev;OOJtuali~ad
porque el :fisco no debe i'>er.der la diferelíl·
-cia de
~lí]Lpl!lesto
que
se~ia
necesario hacer para mantener su
vida.
N
G>
1es posible adiv1i®ar (de que dat0s ha partido la comi·
·sii©in
:pM'a oonciluir que la proc1uccicm de Tarapacá ba-sta pa–
Ta
sa,1\isfaeer el eo:nsumo universal. Pairece que ha olvidado
'qlllle·
-Dt>
1es cil:able oomstrl!ciir otros fer1·ocorriles que los exis·
·temr-tes., que
ya
se han apoderad0 de los únicos trayeetos po–
sibles i 1Veneiendo dificultades que asombran. Ha olvidad<i>
.q:ue ilia facultad
de
a:car11eo de un ferr.@carril es limitada,
ii
.que entónces fos existentes limitarían. la produccion a s1us
me<il~IJ>S
de tDasporte. I a1m cuando fuera posible comstruir
o.t·r0 ferl'ocarril, mo se tentaría la empresa, porque los an–
ti1g.mos, que ya tendrian amortizado gran parte de sn coste
de prodJUcoion, baja:ria:n sus fletes para no deja:r llevar al