CAPITULO XIII
Llega a Lima el nuevo inquisidor Antonio Ordoñez
i
Flores.-Denun·
cios que en su contra se envian al Consejo.-Ordoñez acusa1 a sus
subalternos.-Autode 17 de diciembre de 1595.-Reos penitenciados
fuera de auto.-Nuevas ¡acusaciones contra Gutierrez de Ulloa.–
Su prision
i
muerte.
El Tribunal, miéntras tanto, no habia quedado abando–
nado. El licenciado Antonio Ordoñez
i
Flores, a auien el
..t.
Consejo habia designado para ir a Lima, partía, en efecto,
de Cádiz el
9
de mayo de
1593,
el
29
de agosto estaba en
Panamá
i
el
4
de febrero del año siguiente era recibido
al desempeño de su oficio.
Una vez que se vió solo, fué su primera medida auto–
rizar que todos los que tuviesen que cobrar algunos cré–
ditos en. provincias distantes sujetas a la jurisdiccion del
Santo Oficio, podian cederlos a éste, a condicion de partir
por mitad lo que se sacase/ i en seguida, como hubiese
fallecido el alguacil Juan Guffierrez de Ulloa, nombró en
su lugar a un hermano suyo llamado Juan Gutierrez Flo–
res, caballero de la Orden de Alcántara.
2
Hacia apénas un año a que servia el nuevo inquisidor
cuando comenzaron a llegar al Consejo gravísimas acusa–
ciones ·contra él, enviadas precisamente por sus mismos
subalternos; i
~raunque
andaba el tiempo tal que no osa–
ban fiarse unos de otros," Juan de Saracho le tildaba de
"mozo tan mal acondicionado, que no hai quien le sufra,
si pudiesen los hombres huirle,"
i
de que a pretesto de
l.
Oarta
de 30 de diciembre de 1594.
2.
Id.
de 4 de noviembre de 1595.