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LA INQUISICION DE LIMA
de lo que en esto passó, y pareciPndome que no conve–
nia pasar en silencio lo uno
y
lo otro, sino saber cómo el
dicho fray Francisco andaba y estaba en la dicha forma,
llamé al provincial de su Orden y al prior de el convento
de esta ciudad y les pregunté lo que en ello habia, los
quales me dijeron que habian entendido que el dicho fray
Francisco procedia de la manera que está referido
y
sa–
bian que solamente había traido lícencia de España para
pasar al rio de la Plata a cierta cobranza,
y
que el dicho
ynquisidor le habia traído desde Cartagena a este reyno,
no obstante que ni él podia passar a él, ni los prelados re–
cebirle, porque no traia órden para ello,
y
que tenian no–
ticia de que en las partes donde habia estado vivia n1as
a su gusto que a satisfacion de la Orden,
y
particularmen–
te, que le habían tenido presso en la ciudad de Segovia
de ese reyno,
y
que con1o estaba en casa de el dicho yn–
quisidor no se habían atrevido a pedirle la licencia
y
re–
cogerle a su n1onasterio o volverlo a España,
y
que seria
bien ver la que traía
y
que ellos traían una cédula de
Vuestra Magestad dada en Tolosa a veinte ele diciembre
de
85,
despachada a pedin1ento del procurador de su Or–
den, donde 1nanda Vuestra JVIagestad que a todos los re–
ligiosos de ella que vivieren fuera de los monasterios
y
an–
duviesen sin órden ni licencia en este reyno, los embie a
ese, la qual me dieron, y visto todo mandé llamar al dicho
fray Francisco y en presencia de sus prelados le dije que
mostrase la licencia con que había passado a este reyno,
y
la órden que tenia para estar fuera de la suia y andar
como andaba, el qual respon
dió que habia passado con li–
cencia de Vuestra Magestad Y.de sus prelados a este rey–
no a negocios de su Orden,
y ansí, encargué a los dichos
provincial y prior que le llevassen y tuviessen en su con–
vento como frayle professo de él, y que viessen y exaini–
nasen las licencias que decia tener, me advirtiessen de lo
que les pareciese, y habiéndolo ofrecido así y salido .de mi
apossento con este acuerdo, se fueron con el dicho frayle
por casa de el dicho ynquisidor, donde él se quedó
y
ellos ·
se fueron a su convento, y despues el
~icho
fray Francis–
co vino a él juntamente con el a]guacil maior del Sancto
Officio
y
exibió ciertas licencias que ten'ia, las quales eran