CXXXVI
LA INQUISICIÓN
to
Triburi~l
del referido sugeto, y estar para salir los
referidos navíos para España, y al mismo tiempo á
empeños de los parientes é informes de la ciudad por
algunos de los ministros de ella con sus deudos, y
lo han sido los alcaldes actual ele primer vGto, y en
los años antecedentes otros ele las mismas calidades,
y el gobernador muy amigo suyo; su sargento ma–
yor casado con sobrina del dicho padre; todos pol'
sus empeños é informes han conseguido cédula de
obispo de este obispado para el referido, en cuya po–
sesión se halla por cédula de ruego y encargo ele
S.
M. al Cabildo ele esta santa Iglesia, para que trans–
firiese en el referido la jurisdicción, y ínterin le vie–
nen las bullas para consagrarse, esté gobernando di–
cha santa Iglesia.; y porque entonces será rnás dificil
el remedio, y que primero que yo haga informe á
Lima de esta providencia,
llegar~.11
á Espaii·a dichos
navíos, me resolví
á
dar
á
V. S.
I.
esta noticia, por–
que, puesto sobre el candelero de la iglesia dicho
padre, y consagrado, no teniendo quien en esta san–
ta Iglesia en tan alto puesto le vaya á la mano, y á
vista ele los herejes del real asiento de Ingalaterra,
serán mayores los escándalos que se originarán en
los ridículos escandalosos sermones ele este sujeto,
pidiendo á V. S. pongan en esa corte el remedio de
estos daños como mejor parecíere al supremo em–
pleo y cargo de V. S. I., á qnienes guarde Dios mu–
chos años para amparo de la cristiandad y defensa
de la fee.-Buenos Aires, y junio
3
ele
1731
aiíos.–
Muy ilustres señores B. L. M·. ele Vuestras
~eñol'ías
Ilustrísimas, su capellán.-Doctor
Joseph Antonio
Meléndez de Figueroa.
Decreto:-Remitase esta carta original al, inquisi–
dor de Sevilla don Francisco Pérez de Prado, orde-