EN CARTAGENA DE I:"lDIAS
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t iclo después del auto
á
Es paiía para que sufriese
.cúrcol perpétua.
1
En
1724
el jesuíta Francisco Cata ii o, denunciado
.e n I\Iérida por solicitante) logró escaparse
á
España
y
hubo de s uspenderse su causa.
E l chantre de la Catedral ele Cu ba, don Toribio de
la Bandera, fu é procesado en
17:i2
por proposicio–
nes, y al aüo siguiente ol canónigo de Ca racas don
Lucas Casimiro de Salas por solicitante .
José Ricord, francés, residente en ,tJompox , de–
n unciado por proposiciones y blas femias en
1750,
fué condenado por se n tenci a -del Consejo,t en
1761,
en destierro
clr-;
las I ndias y en ocho afíos de presid io
e n Africa; y en aqu el mi smo afio el clér igo Anton io
G uzmán y '\1on aslerics,
fLlé
procesado por solici–
tante en San ta Fe; en
1755,
por igual cleli to, el
franciscano Fr. J osé González, r esidente en la Ha–
bana .
En
1758
se enj uició á don P ed ro Barriga, oficial
r eal do Ocaüa, por desprecio do las censuras
y
va–
rios hechos y propos iciones, cu ya caus·a fué manda–
{:la
suspender por el Consejo,
y
á don Fe rn ando
Bustillo, protector fi ::cal de Santa Fe, por proposi–
-Ciones estampadas· en un parecer qu e di ó al Rey,
h echo que le valió privación temporal el e su oficio.
En los a fío s de
1760
á
Fr. Francisco Serrucl o, mer–
.ceclario de Car tagena, por solici tante; en
1761,
al
.a gu stino F r . Juan Tin ón, por p roposiciones; en
1768,
á Fr. Juan H idalgo, franci scano, por solici–
tante.
r.
Ca rta de
Guti~rrez
Escalan te, fecha 4 de abril d e 1718.