Siglo
XVII.
1
l
4
HISTORIA ECLESlA STICA
song eros que se habian dado en otro
ti eml
po
á
los
A
tana ~ ios
:
á
los Cri...Óstotnos,
y ~
los
Tom~ses
de
Cantorberi. E stos
eran 1
intrépidos
defensores
de
la
Igle ~ ia
,
los
Obis
pos dignos de siglos ·mas f eli ces que arra
jaban
á
los pies todos los intereses
human
por no seguir otra que la ley de
su ob lig
cion: ' hon1bres en fin superiores
:í
las esp
ranzas
y
á
los temores de la tierra
que p .
una generosidad rara en aquellos tiempos
de
graciados querían mas
exponer~e
á
perd~rlo
t
do, que
á
abandonar los derechos sagrados
que
eran los depositarios
y
conservadore).
Pa
ticipaban de
las mismas alabanza'S
los Ecl
siásdcos empeñados en
la
mi '> nla
causa:
se
canoniz~ba
su
resistencia con los bellos
nom
bres
de
firmeza verdaderamente
sacerdotal
y
de valor heroyco , pasando
hasta
Jlamar
los Conft: sores
y
Santos. El lenguJ ge
que
u só quando las in1aginaciones e stabJn en s
mayor hervor ,
y
el calor del
di scurso
es·
taba excitado
cambien
por resentimientos vi·
vos
y
intereses poderosos , éste fué
el
qu
se ha visto en todos ti empos. Quantas
v~
c es se h an mezclado ]as pasiones
violentaS
con
l as
grandes di sputas,
y
e) obj eto de es·
t as
queJa'i ha
si d o de la ca li da d de
unirse
c on
las
id eas d el zelo
y
pi edad, otrJs
tan–
t as h n producid o
ig u Jles ef< c t o
; pe ro
que
eJ
nuest ro
ti
em
· se haya n repetido las
mis·
mas