Siglo
1
v.._
,X II.
I
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HISTORIA
l!Ct.ESIAS1'ICA.
Inocenrio XI , en un negocio de la
natura
leza del --
que se
trlta -.,
haya podido
escribir
cosas ,
que
acaso se hubieran expresado
con
ménos fuerza
y
calór, aunque se tratase
de
los intereses mas
estimados
y
sagrados de
la
Igle~ia.
En
efecto , ·un lector que no estuvie·
se instruido en
el
verdadero objeto que
exci·
1
taba el zelo del Pontífice,
y
que
hiciese
jui·
cio por los escritos de que hablamos, ven–
dria
á
creer que el negocio de la regalía
·era
el mas importante que se
había
excitado
mucho tiempo habia en la .Jglesia :
y
que el
Decreto de
1673
ponia la Fe
y
la
Religion
en
riesgo
de perecer en Francia , si
esta
ley
se executase en la Di6cesis de Alet
y
de
Pamiers , con1o en las
otras
del Reyno.
El
Padre Cerclo animado con la protec•
cion
que
babia hallado en Roma ,
y
~on
los
Breves del Soberano Pontífice, que eran
á
un
tiempo la prueba
y
el fruto ., se considera·
ha como- el Único Vicario General, esto es,
el Único superior legítimo de la
Di6cesis de
Pamiers. Envanecido mas que nunca con su
au.t0ridad, desde que el Papa en algun modo
le babia consagrado , iba multi p1icando
ca~a.
dia los autos desde
lo interior de su rett–
ro. U nas veces prescribía reglas de conduc–
ta ·
á
Jos Eclesiásticos
y
al pueblo , exhor–
tándolos
á
Ja paciencia
y
á
]a firmeza, como
si
hubieran
estado en -un
tiempo
de perse-
cu-