GE
ERAT..
99
p:a
proreslb:ln
el
Arri:~ni
mo.
Unos
y
otros
Sigio
apoyan
en
el
prim~r
Coth:ilio
de Orleans, XVII.
celebrado en
5
07
Ó
5
1 1 ,
en el qual cr en
ha-llarse
la reg:dÍJ. cbramente expre
ada
co-
o un derecho que su b<,i tia desde entónces,
de que
u~aba
el M
n~uca
frances
in e n-
radiccion.
El
canon
de
e te
Concilio
que
ellos citan
par.1
prueba de su opinion
es
J
quinto
en la edicion
del
Padre
Sirmond.
ero
á
los
ojos de los que pesan en él to–
los
términos
sin
prevencion,
nada
ofre-
que
·pueda aplicarse
á
la regalía
tal
e mo
cxíste
en
nuestro
tiempo. Los
Padres
del
Con–
e·
de Orleans , en
este
canon
tantas ve–
ces
citado '
no
tienen otro
fin
que
el
de
escribir
el
·uso
qld.e se debe hacer de
los
,
~
efles
que
las Iglesias tienen
de
la
piado-
a
liberalidad
del Re
y.
2Y quál es e te us
~
El ·
asto
en los
edifici
s
ó
Iglesia
, el man–
t
.".imiento de los
Clérigos
y
de
lo
pobres~
y
'el
rescate
de
los cJutiv s. En todo esto
q'
-h
y,
con1o
se
e ,
una palabra que sea.
re1 tiva
· á
la
rcgalb. Este
e el
juicio que
ha
ad de él
el
célebre E ceban
PJsguier
en
su~
servacione de lJ Francia ,
bra curi sa
y}erudita ,
qu~
jamas se e n ulta sin sa·
car
e ella
nuev~c;
luces
bre
los
puntos
s
importante<;
y
mJs ob uros
de
la his–
• de
aquel
Rl
yno.
E.ntre los que han e
crito
de
1
re alí ,
Gz
mu-