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tinuJ:
;
.e
que
han sido ·
condenadas
por
Siglo
Inocencia X
en atencion al sentido que
tic- XVIL
nen
en q.quel Autor. Y añade despues que bs
condena de nuevo como tales , aplicándoles
la misma censura con que ca-da una de el\Js
está señalada:
y
concluye condenando todas
las obras
ya
impresas,
ya
manuscritas , que
se han
hecho,
Ó
pudieren hacerse en ade-
lante en difensa
del
Augustinus
y
de
las
proposiciones censuradas.
El
Papa en
este
Decreto seÍiala
á
lo~
que
rehusaban
son1etene
á
la decision de Inocencio X con expresio-
nes muy
enérgicas
y
muy
lisong,eras
pa-
ra ellos.
La
asamblea
del
Clero , comenzada
en
1)
56.
duraba
todavía quando esta nue–
va constitucion llegó
á
Francia
y
se entre ...
gó
en
14
de
!\1arzo
de
16
s
7.
Tres
di as
des·
pues
los
Prelados
llenos
de
satisfaccion
vien–
do
que la Cabeza de
la
Iglesia
se
explica–
ba en
esta Bula , como
ello~ mi~mos
se ha–
bian explicado en sus de liberaci0nes ; la re–
viéron con una perfecta unanimidad ,
y
or–
denáron
· que se publicase
en
todas
la~
l)iÓ·
cesis ,
y
se le diese cumplimiento conforme
á
la
declaracion que
el
Rey
hizo expedir con
los mismos fines. Mas esta union
de
las dos
potestades , que en Jos tien1pos antiguos ha–
bia sido
suficiente
para
destruir
y
disipar
las
n1a
y
ores heregías, no bastó entónces pa..
ra