G~N~~A~.
15
pues
que
la
Iglesia hubiese
sentenciad~,
que Siglo
án tes de su definicion.
.
·
XV
lt.
Entre tanto que hJbia
n1as \"ivas
dispu–
tas
que
nunca acerca
de
este
nuevo
inciden-
.
.
te,
se
tenia
en
P
.nís
una
junta
general
del
Clero , de los Prelados ,
y
de Jos
Diputados
de
segunda clase que la componian, de
to•
dos
les Obispos
que
se
hallaban
entÓnce~
en
la
capital
convidados
á
ella ,
y
eran en
·todos treinta
y
siete. Su principal ocupadon
fué examinar
y
reveer todo lo que se
habia
hecho
en la juntas anteriores con el motivo
de las contestaciones
presentes. Acabado
es~
te traba jo confirmáron
y
renováron
unanime ....
mente las
deliberaciones
que se habían to–
rnado por el
Cle.rosobre esta
tnateria
en Jo¡
años de
1
6
5
3 ,
1
6
54 ,
y
1
6
S
~
(era
uel
año el
de
1
6
56.)
y
resolviéron
escribir al
P:1pa
p3ra
darle cuenta de
su
conducta·,
y
inforrnarle del
nuevo
medio
de que se
servian
los defensores de
la
doctrina atribuida al
Obis.pode
Ipre~
,
por evitar la
excomunion
con
,que
le habia herido.
Inocencia
X. h:1
bia
,
muerto ,
y
le
había
sucedido
Alexandro
VIT,
el
q
ual ,
por
haber sido uno de
los comhio–
nados
en
este grande
negocio ,
estaba mejor
instruido que nadie en todo lo que
l'\a
bia
pasado
en
Roma desde
el
principio,
y
sabia
mas
bien
h~s
fines que
habian dirigido
á
su
predecesor
en el
juicio con
que
lo
ha
bia
I>
4
ter~