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beneficio dió un mandato
y
apostolica delegacion
á
San Beunon,
Obispo de Misnia, de predicar en ellos
y
administrarles el santo
sacramento de la Penitencia,
con facultad de absolver de los casos
reservados aun
á
la
Sede Apostolica.
Tenia ese santo Obigpo el don
de la palabra; inducia á sus penitentes á la compuncion
y
á
las
lágrimas; era indulgente en absolverlos, y con facilidad les hacia
abrazar cualquiera penitencia (1).
El úso de las confesiones generales, que tiene la sancion de .
todos los siglos (2), en el undecimo, que nos ocupa, fué rubri–
cado aun con milagros. San Poppon resucitaba al monje Heri–
manno ereido .ya muerto, para que, la hiciese, ·
á
fin de revalidar
las confesiones hechas sacrílegamente con omitir pecados por ver–
guenza (3). Otras piadosas matronas la hicieron en vida y en
b
hora de la muerte aun de solo pecados veniales (4).
Los Santos de este siglo no eran menos solÍcitos en frecuentar el
santo sacramento de la Penitencia, que los de otras épocas. Fuera
de los ya mencionados, que Ja practicaron personalmente y á los
cuales pudieramos añadir San Pedro J?amiano, San Anselmo, San
Bernardo de Menion,
y
el B. Richardo
(o),
es curioso el hecho de
San Poncio, Abad del monasterio de San Andres cercano á Aviñon.
Rogado por el pueblo á que entrase en la iglesia de la ciudad de
Carpentras en la Provenza para exorcizar á un energumeno; no
quiso presentarse con su compañero ante él, sin limpiarse primero
con la confesion de sus pecados. Cumplido este acto, entraron :
y
apenas el
e~ergumeno
lo vió, sin conocerlo empezó á decir en alta
voz :
«
Aquí viene el gusanillo de San Andres.
»
El santo se puso
en oracion.,
y
acercándose luego, pregúnto al dem?nio :
«
Qué
(i)
Bolland. die
i6
Jun., tom. III, pag,
1.69. -
(2) Ademas de los muchos ejem–
plos que llevamos registrados, podríamos añadir la confesion general del rey Clo–
tario~
de que habla S. Gregorio de Tours
(Ilistor.,
lib. lV, c. xxt),
y
la de Pipino,
que Je aconsejó Hincmaro
(in Analectis ad CcLpitul. Caroli Calvi).-
(3) Bolland.
die
2o
Jun. -
(4)
Ann. Bened.,
t. IV, pag. 068, 070 et
o9i. -(o)
Bolland, .die
~Jun.,
t. II, p.
108o ;
et die i7 Jun., etc.
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