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284-

beneficio dió un mandato

y

apostolica delegacion

á

San Beunon,

Obispo de Misnia, de predicar en ellos

y

administrarles el santo

sacramento de la Penitencia,

con facultad de absolver de los casos

reservados aun

á

la

Sede Apostolica.

Tenia ese santo Obigpo el don

de la palabra; inducia á sus penitentes á la compuncion

y

á

las

lágrimas; era indulgente en absolverlos, y con facilidad les hacia

abrazar cualquiera penitencia (1).

El úso de las confesiones generales, que tiene la sancion de .

todos los siglos (2), en el undecimo, que nos ocupa, fué rubri–

cado aun con milagros. San Poppon resucitaba al monje Heri–

manno ereido .ya muerto, para que, la hiciese, ·

á

fin de revalidar

las confesiones hechas sacrílegamente con omitir pecados por ver–

guenza (3). Otras piadosas matronas la hicieron en vida y en

b

hora de la muerte aun de solo pecados veniales (4).

Los Santos de este siglo no eran menos solÍcitos en frecuentar el

santo sacramento de la Penitencia, que los de otras épocas. Fuera

de los ya mencionados, que Ja practicaron personalmente y á los

cuales pudieramos añadir San Pedro J?amiano, San Anselmo, San

Bernardo de Menion,

y

el B. Richardo

(o),

es curioso el hecho de

San Poncio, Abad del monasterio de San Andres cercano á Aviñon.

Rogado por el pueblo á que entrase en la iglesia de la ciudad de

Carpentras en la Provenza para exorcizar á un energumeno; no

quiso presentarse con su compañero ante él, sin limpiarse primero

con la confesion de sus pecados. Cumplido este acto, entraron :

y

apenas el

e~ergumeno

lo vió, sin conocerlo empezó á decir en alta

voz :

«

Aquí viene el gusanillo de San Andres.

»

El santo se puso

en oracion.,

y

acercándose luego, pregúnto al dem?nio :

«

Qué

(i)

Bolland. die

i6

Jun., tom. III, pag,

1.69. -

(2) Ademas de los muchos ejem–

plos que llevamos registrados, podríamos añadir la confesion general del rey Clo–

tario~

de que habla S. Gregorio de Tours

(Ilistor.,

lib. lV, c. xxt),

y

la de Pipino,

que Je aconsejó Hincmaro

(in Analectis ad CcLpitul. Caroli Calvi).-

(3) Bolland.

die

2o

Jun. -

(4)

Ann. Bened.,

t. IV, pag. 068, 070 et

o9i. -(o)

Bolland, .die

~Jun.,

t. II, p.

108o ;

et die i7 Jun., etc.

·