1000001177

22 / 416

- Y1-
lo [11], no haver C<lSj. mas acomodada para la salud de los
Pueblos, para restablecer la antigua disciplina, y para cons–
tituir una solida, y verdadera paz entre los Príncipes? El
Prelado en estas juntas conoce á su Clero, obserYa sus ta–
lentos, advierte sus inclinaciones, especula sus costumbres,
y con conocimientos tan individua.les provee oportunamen–
te de mandatos, que se proporcionan á las necessidades: Por
esso un grande Obispo [12] decia, que en estos casos, lepa–
recía, ver con oídos, ma.nos, y pies, como si solo los ojos no
fuesen suficientes organos para todo, lo que havia, que mi–
rar. Los estatutos, que se hacen, como sencibilizados por la
vista, y que los mismos, que los han de guarda.r han tenido
parte en sus producciones, son mas religiosamente observa–
dos, y como mas recientes, parece, los consideran mas obli–
gatorios.
El Santo Concilio de Trento [13], que despues de dar
las mas seguras, y extensivas reglas de la verdadera, y so–
lida Doctrina, nada dejó intacto, de quanto se pudo discur–
rir concerniente para la estabilidad ele sus Decretos, en vno
de ellos dispuso, que en cada Triennio se celebren Conci–
lios Provinciales, y annualmente Diocesanos, ba,jo de las pe–
nas establecidas por lo. Sa.grados Canones; y en las Leyes
Mn!1icipales de estos Reynos [14] por nuestros Catholicos
Monarcas se enca.rga el cumplimiento de tan proficuo Con–
ciliar Mandato, extendiendo el termino de los Provinciales
de doce en doce años [15] en virtud de particular Aposto–
lica confession.
Consideradas. pues, las venta,jas, que trae á.una Diocesis
la celebracion ele estos Synodos con la obligacion, en que
nos consti tuye la obediencia., de dar cumpl imiento ¡Í tan Su–
periores, y recomenchbles establecimientos, mirando el dila–
tado tiempo de mas de un Siglo, qno ha pasado desde el Año · ·
de 1636, en que por nuestro Predecesor el Illustrissimo Se–
ñor Don Fernando Arias ele Urga.rte, de buena memoria., se
publicaron las modemas, y reconocidos los desordenes, y
abusos, que en todas materias se han introducido, y en mas
de tres años de govierno hemos obscnaclo con grave sen-
[ll] suaConfil. 20 §.18.
[12) Vnlerio celebre Obi8po <le Verona in libello acl OJerum
·••mm. Citalo oro Papa lib l. Cap. 2. ele Synode. '
[13] Sefl'. 24. de refo!'lnat. Cap. 2.
[H] C. 3. L. l. tít. 8.
[15] L. l. eódem.