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LIBRO P RIMERO. TIT. VII.
minados, como bautizan, y assientan los
bau~iza
dos, como oyen de penitencia, y hazen sus padro–
nes, como cassan, conforme al Concilio Provincial
manda dar con toda diligencia, y no estará á su vi–
sita el Cura, hasta que se le haya de tomar la confes–
sion, y se ·aldroi del Pueblo á la Doctrina mas cer–
cana, para que con mas liberalidad digan to–
dos, lo que sienten ele su persona, y oficio, y entre–
tanto supla por él en el Pueblo el Visitador,
ó
quien él mandare,
ó
si pareciere convenir, venga
el Clerigo de la otra Doctrina,
<Í
suplir por él, y en–
tre tanto doctrine él allá, donde estuviere.
"23. Ytem , paraque los Indios entiendan lo mu–
cho, que importa, que la visita es para bien, y me–
jora, aun en lo temporal, si fuere posible, hagales
vna platica muy Christiana, y amorosa, eú que tra–
te d.e su bien,
y
salvacion, donde ta.m
bien se les ex –
plique, quan necessaria sea la visita,
pa.raanimar–
los, y esforzarlos,
á
que cumpl an con
el baptismo,
que.han recibido, y con los maJldamiento;:; de Dios,
y obras de misericardia con los 1)obres, que tienen
coxos, ciegos, e
nfermos, &e. Que
HO
pueden traba–
ja.r , paraque a.ssi
fl.lc::mcenla misericordia grande de
Diosen los Cielo
s para siempre,
y
para corregir, y
cmmendar , los qnc han faltado, en ser buenos Chris–
tianos,
y
luvn tornado
.t
sus pecados viejos,
y
mala vi–
da,
y
exemplo, que llcnt certissimamentc al Infier –
no. Y assi mismo es la visita., para corr egir,
y
em–
mendar lo:; Curas, que entre loR Indios no han he–
cho biGn su oficio, ni los lutn tratado como Padres á
hijo:s , antes los
Jmn
agl'aYiado, t1·abajandolos sin
paga,
ó
en otra alg una ma.nera; Por tanto vengan
clicieudo con verdad ,
y
deseo de tener, quien los en–
:;cñc
á
ser buenos Christianos con vida,
y
exemplo,
que lo:; oyroi,
y
consolad , y en todo , lo que estu–
vieren
<tgrfl.vi::~.cloR ,
los clesagrrwiad.,
y
castigará.