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Lc:jos de llacer abstraccion del Gobie¡·no. he qucridLl
entenderme con él,
y
lo he hecho del modo sincero
y
le–
gal que US. ha visto. He cnidado, no obstante el
pase
otorgado en
1!>65,
de asegurarme de un modo franco
y
legal, de la disposicion de. S. E. respecto al Jubileo.
y
ture la satisfaccion de saber que era fa,orable. por su
contestacion de palabra que me ha sido tan respetable,
cc.rno lo es efectivamente la del Supremo J efe que diri–
ge los destinos de la República.
Si S. no conoció entonces qué J ubilco era del que
e trataba, como lo manifiesta, el defecto no ha estado
de parte del :Metropolitano, que mandó decir á US. por
medio de su Pro·secretario, que el Jubileo que debia pu–
blicarse era el mismo
á
que se dió el
tJase
por el Gobier–
no del General Pezet,
y
que Su Santidad se babia dig–
nado prorogarlo para el año corriente de
1866.
Este rec–
to proceder, nunca puede interpretarse como una tras–
grcsion de las leyes
y
de las fo rmas establecidas.
Sin embargo, S. E. ha tenido á bien expedir la cnun·
ciada resolucion fecha de aye1·, que uS. se sirvi0 adjun–
tarme en cópia en su estimable oficio de la misma fecha.
Por ella no solo se manda suspender las temporalidadcs
del Arzobispo, sino que se ejerza
la
accion fiscal en la
forma que determinan las.lcyes, porque el Metropolita–
no ha ejecutado la Encíclica sin el prévio
exequatu1·.
So–
bre e taparte ya he dado á US. mi contestacion en ofi·
cio de ayer; pero hoy me permito expresar <l US. la do–
lorosa impresion que he recibido al presenciar el no in–
terrumpido trabajo, que con esmero
e ha empleado en
los días
y
en las noches, hasta llegar lo mas pronto po–
sible á la rcsolucion de ayer, publicándola por el perió–
di~o
oficia1 en el mismo de su fecha,
y
llev;índo e el celo,
hasta di-ponet· que se recojan, como efectivamente se ha
hecho, en la noche del 11, todos lo ejemplares del ":ilfa-
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