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.
TRlTlDO TERCERO
no pecarás; porque la
conside~aciolÍ
de
Í\l
pr·esencia ·de nuestro
Señor, y aun de otro hombrn cualquiera, réfreña aun
á
"los mas
insolentes,
á
que na pequen. Y san Basilio dice, que solo este
rem~dio
es muy .eficaz para
venc~r
todos los -vicios,
y
para hacer
·que
tú
·no tengas vergüenza de nadie, viviendo hien, y todos la
tengan de
tí,
si hicieren algo mal. J_,a vi·sia de· Cristo nuestro ·Seño,r
l
clavado en la Cruz;
¿á
quién no mqverá? San .Agustin dice (
f):
No ·
hay medicina, ni remedio mas: eficaz coi1tra la tentacion deshones–
ta, como ver
á
Cristo crncificado, y pensar eil su muerte;
y·
pasion.
Y san Bernado: mi Dios está pendiente de un palo, y clavado en
una Cruz, ¿y tengo yo de darme
á
deleites ('2)? Considérate á sus
pies, y que te dice: por. amOl' de tí me afrentaron, me· prendiernn, .
y abofetearon; por
tí
me trajernn de tribunal ·en tribunal, y me
condenaron á muerte afrentosa ·; por
tí
me deslludaron, me azÓtaron,
y
cornnaron de espinas; por
tí
me cru.cificaron ·entre dos ladrones,
y
atravesarou ·mi costado con una lanza; ·por
tí
estoy manando san–
gre, que apagué el fu ego de tu concupiscencia .: en reto1!fio de esto
resiste tú esa tentacion, no quieras gustos tan á casta de Jesus
(3):
El ángel de
t~
guar.dasiempre te está mirando,
y
acompañando
donde quiera que estás; ten le respeto, pues él tiene cuidado de que ·
seas muy casto; sirvas á 'Dios,
y
te salves; y para esto te aconseja,
y te despierta
á
toda virtud,
y
te 'a'compaña con amor, y te
de:–
fiende de .tus enl'migos, y si ve que recibes bien stis avisos, tiene
grande gloria accidental ; si no, cierto que si la bienaveuturanza de
que goza, no se lo impidiera, su dolor·fuera ian grande, que lo con–
sumiera,
y
las lágri1nas tantas· que lo hicieran desfallecer.
Oye
su
impulso, y aviso interior, no , le tengas eÍl poco , ni hagas cosa en
público, ni secreto, que pueda ofender á tan noble Maestro (4). El
tlemonio te está acechando, y notando los átomos, para engañarte,
para inducirte, para acusarte, y mas que se vale de
tí
contra
tí,
y
el mayo1: enemigo que tienes tú, eres tú mismo , procurando la eje–
cucion Je la obra;
y
despues de rendido te la impide para que an-
(1)
In
IYian. c.
3'1 .-("2) In
5e r.
hooesl. vitre.-(3) Ilug. Vict.
lil1.
5. de
aoí111a c. '23.-(Li) Chris. liorn. 60. sup. Gen.