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DESPUES .DE PENTECOSTES 323
haber seguido á Jesucristo? ?, Podrán todas decir con con–
fianza á este divino Salvador, á estesoberatrn Juez: nos–
otras hemos dexadó todas las tosas, y te ~ernos seguido~
i Y qué será de aquello.s qne no lo }J©drán dedd ·,
Pocas personas hay aun en medio del tnuhdo que no
estén obligadas á dexar bastantes cosas' por J esucristo:
ninguno que no . deba ihdispensablemente de~prender su
corazon de la aficion á todo lo que posee, si quiere ser
discípulo de Jesucristo: ninguno que no deba renunciarse
á sí mismo; ?,pero podrán todos decir que ~han segµid.o. á.
Jesucristo~ · , -
Seguir a. Jesucristo €s ser_hu'mild.e de corazon., . ser cas..!.
to, inocente, afable., mortificado, caritativo: es'Uevar sú
cruz codos los dias., es llaéerse Violencia todos los dias.
es domar su amor propio y toda·s sus_ pásiones, nó pot
espació de un día ni de dos días~ sino todós lós rlias: es
segul.r las máximas ·y lós ·consejos de --3esucristó y mirar
con horror las rñáxhnas del inundó.
Esa pérsona religiosa tan poco rnortifica:da ., tan poco
exacta, tan poco regular i sigue & Jesucristo~ Ese hom:–
bre tan vano; tan ámbicibso,, tán cárná sual, tan
colérico ~sigue ' á.Jesucrlsto~ Esa inoger \; q!ié .nQ
piensa sino en componerse , q:ue está t engreida de su
hermosura , que pasa los dias _en ·lét '°ociosidad ~ en la ¿¡...,
versiorl, en el regalo; esa n1uger tárt ·iridevbta, p0co cris•
tinana ¿sigue á Jesucristo~ i,le sigo yo mismo~·
- Es cosá que espanta·el ver que no , hay quien espere
la recor!lpensa , aunque so1,1 tan los qu·e cumplen
las condiciones; tt>d·os quetemos dec.ir ·córt los· a'póstoles:
i qué habrá para nosotros~ i y cuiln ocos pbdemos· de–
cir con éllos : nosotros te hembs seguido , y lo hemos de·
~ado todo por ambr~ Porque iquién hay que no _ preten~
da rener el cielo pará siempre, y estar ert la gloria de los
bienaventurados~ i Y sobre qué fundamos esta seguridad~
isob!·e qué estribá nuestra.eotifiani;a ~ , ,
Estriba, Señor, sobre vuestros infinitos merecimien–
tos; sobre vuestra misericordia, 'sobre vliéstra bondad;
pero sé tambien que se debe fundar ert vuestras palabras
y en vuestrós exemplos. Hasta aquí esta confianza ha si–
do falsa y presuntuosa; pero desde ~~te momento, ama–
ble Jesus mio .-Ya á•sér real y perfecta i pues va á ser
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