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DE QUARESMA.
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me paro , .ni atiendo sino al motivo por qué _se hacen:
Ego Dórninus scrutans cor::: qui do unicut"que juxta fruc–
tum adinventiónum suárum.
Oesde el octavo siglo ha sido el evangelio de este dia
la historia del rico Avariento,
y
del pobre
Lázar0.
Ha..
bia un hombre rico., decia el Salvador
á
sus discípulos,
que se vestia de púrpura ,
y
de lino muy delicado, que
nada negaba á sus sentidos, qµe tenia todos los dias sun–
tuosas ·comidas, gast:mdo profusamente en sus placeres,
y
pasando todos los dias entre delicias ; al rnis_mo tiem.–
po un pobre llamado Lázaro, cubierto todo de llagas,
estaba tendido
á
la puerta del rico pidiendo de limosna
las migajas que caían de la mesa : dichoso,. si hubiera
pcr
dido tener este bello socorro
,para
matar el hambre,_
y
mas bien para .retardar su muerte ,. que para conservar
su
vida ; pero ·ºº babia quien quisiese hacerle este cor–
to servicio, al paso que los perros. estaban muy gordos,
como r'egularmente sucede en las casas donde reyna la
suntuosidad
y
la abundancia.
El
único alivio que recibió
este pobre en su extrema miseria ,
era el
venir algunas
veces los perros
á
lamerle las . llagas.
El
contraste
y
pa–
ralelo de estas d0s condiciones tan ·o.puestas está bien
á
la vista : ¡que diferencia entre estas dos vidas! Pero en
fin la
muerte viene bien pronto· á terminar
las,
delicias,
del uno ,
y
las miserias del otro ;
¡
pero que diferentes
las suertes qne eaben á entrámbos ! Lázaro muere en
su
pobreza ; pero su muerte es preciosa á los ' ojos de Dios,.
y
los ángeles llevan su alma
á
?quel Jugar de paz
y
de·
gozo donde las almas santas , lib.ies de los
laz~s
del cuer–
po ,
y
exentas
de
toda miseria ,.
desea
asan con
Abra–
ha.n como los hijos entre los brazos ,
y
ep el seno de un
padre. Lázaro en
m~nos
de- los ángeles asegurado y ,cier–
to de su eterna felicidad ,
i
no se creyó bien pagado
de
todo lo qu e había
padecido~
i
hubiera querido entónces
haber sido dichoso sobre la tierra ,
y
haberse condena–
do~
El rico no-le sobrevivió mucho tiempo. Vino la muer–
te en medio de sus mas bellos dias ,
y
dio
fin
á
s11
deli–
ciosa vida. Muere este rico;
y
su cuerpo tan
a ~' ostum
brado al rega1o, criado en
el
luxo
y
en las delicias, vie-.
ne
á
ser presa del pob-re
y
de los gusanos, al t iempo que
el
alma ., hasta entónces esclava de los sentidos
y
del cuer;
po,,