DE QUARESMA,
deliciósamente. Se quiere ser cnsttano ; pero sir1 picarse
de ser devoto: se quiere ser religioso, sin ser
muy
regu–
lar, ni fervoroso: se quiere edificar entre Babilonia
y
Je–
rusalen una nueva ciudad, donde la ca ridad
y
el amor
propio se:rn igualmente adorados. Se quiere en fin ser ir
á
dos amos: se p retende contentar á Dios
y
al mundo
partiéndose, por decirlo así, entre el uno
y
el otro; pero
en vano
se
pretende esto, porque esta par t icion no pue–
de contentar ni al uno ni al otro. La mitad es nada para
Dios,
y
tampoco se rá bastante para el mundo. Dios lo
quiere todo,
y
el mundo querrá mas. No se complace al
mundo,
y
se desagrada siempre
á
Dios. Division crimi–
nal en las gentes del mundo: di vision espantosa en los
que viven en la religion. Tal
es
el retrato de todos los
que viven en la tibieza. ¡Buen Dios,
y
que est1!o tan
deplorable
y
tan lastimoso!
El evangelio
es
de San Juan, cap.
2,
In illo
témpore
:
Prope erat
pascha
jud¡eorum,
8
ascén–
dit Jesus Jerosólymam,
8
in–
venit in templo
vendéntes
bo–
ve
s,
8
ooes,
8
colúmbas,
8
num11!ários
se déntes.
Et
cum
fecfs
set
quasi fiagéllum de fu–
ntculis
,
omnes
ej ecit de tem–
pto
,
9ves quoque,
8
hoves,
é.B
11umulari8rum
ejfuJit
'2S
,
8
mensas
subvértit. Et
his
,
qui
t:{)fúmbas
vendébant,
dixit: au–
férte
ista
hinc
,
8
nolite
fá–
cere
domum
p atris mei
,
do–
mum negotiati8nis.
Recordáti
sunt vero
discípuli
~jus
quia
scriptum
est: ulus
do mur
t u'2
fomedit
me. Res
pondéru nt
er–
go
jud¡ei,
8
dixérunt
ei:
quod
signum
osténdis nobis quia
h1t1c
fa cis?
Respóndit
Je
sus~
8
di–
l!(it
eir: sólvit e
remp tum
hoc ,
8
in tribus
di ebus
exdt dbo itlutl.
Dixérunt
ergo
judcei: quadra-
gín-_
En aquel tiempo: Estaba cercana
la pascua de los jud íos,
y
fu é
J
esus
á
J
erusalen , y halló en
el templo gente que ve · bue–
yes , y ovejas , y palomas ,
y
banqueros que estaban sentados.
Y
habiendo hecho como un lá–
ti go de unos cordeles , los echó
á
todos d
1
templo, y
á
las ove–
jas tambien , y
á
los bueyes,
y
derramó el di ne ro de los cam–
bistas ,
y
derribó las mesas :
y
á
los que vendian las palomas,
les dixo : qui tad esto
de
aquí,
y
no querais hacer la casa de
mi
Padre casa de negociacion.
Y
sus d iscí pu los se acordáron
de que está escriro: el zelo de
tu casa me ha consumido. Pe–
ro los judíos le r es pondiéron ,
y
le d ixéron :
i
que señal
BOS
das
de poder hacer estas cosas
1
Res–
pondió Jesus,
y
dixo: deshaced
este templo ,
y
en tres
dias le
res-