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V1.
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tan
extraordin~uia
devocion , y ternura, que movió
á
lá–
grimas
á
todos los Religiosos que la o.ian. Dióles la Co–
munion de su mano ,
y
despues lavó los pies
á
gran nú–
mero de pobres. Acabada la comida , se estaba disponien–
do para lavárselos
á
sus hermanos, quando de repente se
sintió asaltado de un violento dolor de costado , que le
obiigó
á
recogerse
á
su pobre camilla, donde se le excitó
una calentura lenta. Finalmente el dia de Pasqua, despues
de media noche, oyendo cantar en Maytines aquellas pa·
labras,
ut veniente
ungerent Jesum,
clamó que ya era
tiempo de que le administrasen la Santa Uncion, y reci·
bido este postrero Sacramento, penetrado de tiernos afec–
tos de amor de Dios ,
y
de confianza en su misericordia,
espiró
á
los noventa y ocho años de su edad, haviendo
vivido quarenta enteros en Dinamarca, dedicado al exer–
cicio de todas las virtudes , singularmente al de una rigu·
rosísima penitenci-a. Sucedió su muerte en el año de
1203.
manife~tando
desde luego el Señor la gloria de su fiel Sier–
vo por la multitud de 11ilagros que obró en su sepulcro.
Veinte
y
un años despLtes de su muerte, el de
1224.
le
canoniz.ó el Papa
onorio III.
r
San Celestino
,
Papa.
San
Celestino, uno de·los
mas
célebres ·sucesores
de
San Pedro, que se han sentado en la Cátedra Apostólica;
ft1é
educado por su padre Prisco , natural de Roma , en
el sólido principio del santo temor de Dios ;
y
apHcado
a
las ciencias , como se
hall~ba
dotado de un ingenio so-–
bresaliente, hizo en ellas grandes progresos ; los. que inn–
tos con un natural como nacido para la virtud ,. formáron
en Celestino uno de los jóvenes mas cabales de su
siglo~
•distinguiéndose ya en la juventud por la exempiar religio·
sidad de sus costumbres, por su singular piedad,
y
por su
grande sabiduría. Consagrado Obispo de Cyro en la. Siria,
Y condecorado con. el titulo de Cardenal de
la
Iglesia de
Roma
á
virtud de los méritos que contraxo en el
ser~i-
Clo