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CAP I TU L 0 X.
li terrninos Populorum , et Prin–
cipes eorum depraeda t us sum,
et detraxi quasi potens in sub–
l imi residentes.
14 Et inveni t quasi nidum
manus mea fort i tudi nem Po–
pu lorum : et sicut collig untur
o va quae de relicta sunt , sic
u ni ve rsam terrarn ego cong re–
gavi : e t non fu it qui move–
r et pennam , et aperiret os , et
ganniret. ·
15 ?, N umquid gloriabitur se–
curis contra eum q ui secat in
ea ? ~ aut exaltabitur serra con–
tra eum a quo trahitur ? quo–
mocl si elevetur v i rga contra
elevantem se , et exaltetur ba–
cul us qui utique lignum est.
16 Propter hoc mittet do–
mina tor Dominus exercituum
in pioguibus eius tenuitatem : et
subtus gloriarn eius succensa ar–
d ebit quasi combustio ignis.
17 Et e·rit lumen Israel in
igne , et SanCtus eius in flam–
ma : et succendetur et devo–
rabitu r spina eius , et vepres in
die una.
18 Et gloria saltus eius et
~ Sujete como si /'· era un nido .
2 A todos los Pue os mas fue rtes.
a A mi imperio, a mis dominios.
4 FERRAR. Si se glorificara ten des–
t ral sobre el t rjan con el.
s Que no puede moverse sino le mue–
ven. Pues t u , Senaquerib , ~ de que e
vanaglorfas , apropiindote t antas vifro–
ri as , si solamente eres nn instrumento
d e la vo rn tad y de la ira de Dios?
' MS. A. Magreza. D ebili tari sus
ioldados y campeones mas robus tos.
7 El orden de las palabras es este: Et
ardebit qu.7Si combustio ignis , SJtccen–
uz subtus gloriam eius . Los mismos He–
breos d icen , que los <;:ieoto y ciucuenta
Tom. V I.
los t erminos de los P ueglos , y
d espoje a us P ri nc ipes , y des–
t h rone co rno pode roso a los que
estaban en al tur.a.
14 Y ocup6 mi ma no 1 asf co–
mo un nido la fortaleza de los
Pueblos z : y corno se r ecogen los
huevos que hau sido desampara–
dos , asi reunf yo 3 baxo · poder
toda la tierra : y no fi 1 q uie n
moviese la ala , ni a briese su
boca , ni graznase.
15 ?, A caso se glo ria ra 4 la
segur cont ra aq~el que co r ta con
ella? 2. o se vol ve_ra la sierra con–
tra aq uel q ue la mueve ? es to es,
como si se levant ase l a va ra con–
tra ,fq uel que la a lza , o se alzase
el baston q ue al cabo es un lefi.o s.
Por esto el D ominador,
de los exercitos envia ra
za 6 sobre sus robustos : y
ardera como q uemazo n de fuego
encendida 7 baxo su gl ria.
17 Y estara la lumbre 8 d e Is·
rael en aauel fuego, y SU Santo
en la llama : y seran encend idas
y devoradas las espinas de e l 9,
y sus zarzas en·un mismo dia.
18 Y la gloria de su bosque co
mil soldado del e•cito de Senaque rfb,
beridos por ngel , fu eron abrasados
de un fo ego interi or , q ue d exo intafro i.
sus vestidos , como acon tece muchas ve–
ces con los rayos. Vease S. GERONYMO.
8 la lu1nbre y el Santo de Israel,
esto es , Dios , q ue p ara los buenos es
todo loz y bondad , y para los malos
u n f ucgo dcvorador , D cut(r . I V . 4 .
H (br. x 11. 29 . abrasari y consumll'a.
los reales de los Assyrios .
9 El yulgo de sus soldados y tropa.
1° FERRAR . Y honra d11 su cara )' su
Carmel. D e su campo fertiL Sus Ofici • –
l es , Comandan tes y Generales. Se com–
p ara por su riqueza el e:x:er~ito al Carm~lo.
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