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A
ADVERTENCIA.
3
bnfos a
lo
meoos en los siete primeros di as de las bod as eran acompafiados de dia
.Y de noche de cierto numero de jovenes de su edad , que se les destin aban para
-
I
su obsequio, y se llamaban los amigos del esposo , de 'que se hace mencion
~epe-
tidas
ve~es
en las Escrituras ; y duraote este tiempo los reci en desposados no se
' vefan sino raras veces, y con mucha reserva. Las vistas de Salomon con su espo–
sa en estos siete dias , tomando en el.las diferentes formas o represent aciones , ha–
cen el objeto historico de estos ocho Capftulos o C;l.ilticos , y se pueden distin-
guir con el D.oll:o Obispo Bossuet en esta manera.
.
En el Cap.
1.
se representan estos Esposos en figura de pastores , y
la Esposa
pregunta al Esposo el lugar a donde conduce su ganado a sestear dur ante los ar–
dores del mediodia, para concurrir. ella con el suyo al
~ismo
sitio. Luego sigue
la
primera noche de los desposorios, indicada en los vv.
3.
4.
5. 6. del Cap.
II.
La
segunda noche se expresa en el v. 9. y el Esposo se presenta a Ia ven tana donde
lc:; aguarda ·1a Esposa ·que le introduce en su casa, y muy por la mafiana se refr–
ra al campo. La tercera noche tardando a venir el Esposo , sale ella en busca su–
ya, y habiendolo e1icontrado lo conduce a su morada, como se ve en.el Cap.
Ill.
I.
2.
3.
4. Por la mafiana sale el Esposo al , cuidad o de sus ganados , y luego tam–
bien su consorte , v. 6. En el Cap.
Iv.
se contiene un elogio de la hermosura de
la
Esposa. Ella convida al Esposo para que vaya a verla ; Cap.
v.
1.
el qual de–
xa despues el convite donde estaba con sus amigos ,
y
no
abrien~ole
Ia
Esposa,
se vuelve a su jardin.
•
P asa la Esposa a buscarlo , y despues de haber sido maltratada por las guar–
das de Ia Ciudad se encuentra con el Esposo , Cap.
vr.
1.
y esta es la quart a•
noche. El Cap.
VII.
I.
nota
la
quinta noche , y el Esposo en ella repite las ala–
banzas de la Esposa , salieodo al otro dia ambos de compafifa para pasar a una
casa de campo, vv.
H. 12.
13.
Y
en casa de
Ia
madre del Esposo pasan la sexta
noche. Cap.
VII.
13. La septima noche, Cap.
VIII .
5. Ia pasan en el jardin, segun
el
razonamiento~
dialogo que alll se expresa. Baxo de este aspell:o y econom!a
sera
ficil
el distribuir este• divino Poema '
·-~~
e coma· dialogos y diferentes vis–
tas de los Esposos , para reconocer
mas~
l
>t'
or este 6rden los grandes arcanos
del Amor Divino , ya con la naturaleza dl'.!mana , con
la
que se uni o el V erbo
hypostatic~mente
; ya con Ia Iglesia Militante , y con sus fieles incorpo
os en es–
te cuerpo mystico por fe
y
ca rid ad ; y ya finalmente con la 'mi sma Iglesia Trium–
phante ,
y
con sus miembros reunidos en ella con lazes indisolubles de
~aridad.
De todo lo qual se infiere evidentemente , que todas aquell as expresiones que en
la
cort.eza de la letra y a primera vista parecen absnrdas y poco convenientes al
cad.Cl:er de los personages que aqu1 se representao , no tienen otro objeto que la
mystica y espiritual union de Jesu Christo con su Iglesia , y con las almas que
Tom. VI.
A z
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