CAPITULO VII.
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milabiturviro sapienti, qui aedifi-
semejará a un varan ' sabio que
cavit domum suam supra petram.
cimentó su casa sobre la pied ra.
25 Et descendit pluvia , et
25 Y descendió la lluvia ,
y
venerunt Ilumina , et flaverunt
vinieron los rios , y corrieron los
ven
ti ,
et irruerunt in domum
vientos,y dieron impetuosamente
ilbm , et non cecidit : fundata
en aquella casa, y no ca
' _,
emm erat super petram.
queestabo · .
""
repiednt.
26 Et omnis, qui audit ver-
2
todo el que oye estas
ba mea haec , et non facit ea, si-
.4ii~P!lis
palabras , y no las hace ,
S'\'
milis erit viro stulto, qui aedifica,. mejará a un hombre necio , ql!e
vit domum suam super arenam:
edificó su casa sobre la arena :
27
Et descendit pluvi
et
•27
Y descendió la lluvia ,
y
venerunt flumina , et flaverunt
vinieron los rí os , y corrieron
vencí , ·et i rruerunt in domum
los vientos , y dieron impetuo-
jlJam , et cecidit, et fuit ¡¡J!¡ina
~mente
sobre aquella casa ,
y
jlJius magna.
cayó ,
y
fu é grande su ruina '.
28 E t fa él:um est, cum con-
28 Y qua ndo Jesus hubo aca-
summasset I esus verba haec , ad-
bada estos d iscursos , maravi-
mirabantur turbae super doél:rí-
llábanse las gentes de su doc-
na eius.
trina
3 •
•
'
29 Erat
a
enim docens eos
29
Porque los instruía , co-•
sicut potestatem habens , et non
mo quien tenia poder, y no co-
sicut Scribae eorum et Pharí-
mo los Escribas 'de ellos , y los
saei.
Pharis_éos.
' T. Gr.
ó¡-touJo-(o) aiJTóv
,
/e seu
'aré.
E sta es la conclusion , dice
SAN
A\,;
STIN
ttl
supra
mrm.
8¡. de todo lo o
Jesu
Christo dixo en el 1crmon que 1·
sobre
el monrc , en el que se compre
de toda
la perfcccion de los divinos pret pros que
pueden servir para formar un
erdadero
C hrisriano. El Señor compara
un f¡om–
bre sabio, que fabricó sobre pi dra
,
)' uo
sobre arena, al que escucha sus pnlabrtit/t
no con las orejas del cuerpo ,
~ino
del co–
razon ,
y
que praélica no un:t
parte sola
de estas verdades , sino
todas.
Este edifi–
cio no podrá ser derribado , ni por las
llu–
vias
de
Jos placeres ,
ni
por los
rios
de las
pasiones violentas,
ni
por los impetuosos
vimtos
de nuestros enemigos que buscan
nuestra perdicion. Mas los que f.'lbrican
sobre arena; esto es , sobre otro funda–
mento
que
el
de la verdad de la palabra
dd Señor
y
de su amor ; estos oyCJl el
Santo Ev.mgclio , mas
no ~
praétican,
n.
M.'lrc. 1.
22.
L uc. 1v.
3 1.
contentándose con ,decir : Señor, Señor}
esto es , con adorarle como Christianos;
pero no cuidándose de cumplir su volun–
tad. Estos
fnbricml
:sobre arena ,
y
estan
expuestos a una
~nude
ruilla.
¿Y qué
ruina mayor, dice
SAN ] UAN
CHRYS6s–
T OMO
H om.
in
M atth. xxv.
que la pérdi–
da de su alma
1
y la privacion
de
los bie-
nes eternos?
•
2
MS.
E f ué grand de·rrudiamiento.
3
•
Se maravillaban oyendo una dofui–
na tan pura,
y
una
moral tan opuesta
a
to–
dw;
los sentidos ,
y
al modo de pensar de
los hombres. Les hablaba no solamente co-–
mo de parte de D ios , !lino como que él
mismo era D ios , had éndoles conocer
el
espíritu de
la
Ley
y
su perfeccion ,
y
acompañando
1
alabras con milagros ,
y
con una interio
ion ,
que
persuadía,
ablandab~
conven
a
los
que le oían.
4
E
1
Texto Gric
~faltan
las
lÍiti–
mas
pal~
lS:
.1
Ph,.'Triséos.