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algo c1iflciles sinó
á
fuerza de contínuo ejerClclO, como se obsel'–
ya en los quo e aplican
á
lamúsica al arte de e. gTima, de e cri–
bir,
&.,
en lo que parece obrar otra fuerza diferente de la
V-oltUl–
tad.
XXVII.
La activÍ(lad espontánea é instintiva
y
la habitual.
La actindad en el alma puede consideratse como instinto
y
como hábito.
'In
tinto es la in encible propension que pro–
vi ne üe la misma.naturaleza, por lacual lo seres viviente on
impulsados
á
obrar de un modo igual
y
constante en las misma
circun tancias, a
í
se producen ciertas determinaciones en el
cuerpo por un impulsQ ciego y fuerte de la Dllisma naturaleza, co–
mo el cerrar los ojos cuando se les amenaza, el Jmpulso que sertti–
mas en -la mano para impedir ·el golpe que vá
á
descargar sobre
ht
cabeza, &a. Enla infanoia los instintos están destinados por la.
cji
vina provideneia para suplir la falta de inteligencia, pue in
ellos no hadallo una multitud de actos necesarios para la
COIl-
ervaeiori.
Los fenómenos espont.áneos de la actividad 'Son 6 no per–
cep iones de ciertos objetos intelectuales,
o
combinacione
t1~
n1.rios objeto, '6 imaginacione , .6 jnclinaciones hácia algun obje–
to,
ó
determinaciones 6 movimiento , Cuanto ·ma aíentaja–
da son la ' cualidades de un espíritu, tanto mayor es su desar–
rollo e pont{ll1eo. 'l'ambien puede originarse de una. fuerza es–
pecial que tienen los espíritu l{umanos comunicando
Oh
otro;
puede oi'iginarse de una influencia directa de aJgun 'espil;itu . u–
perior,
ó
de lo que hemos loido, oído 6 reflexionado anterior–
mente.
Habitud ó Mbito es la di po ¡cion para obrar., -adquirida on
la frecuente repeticion de lo mismos acto . La causa de
]11.
habitud puede er ocasional
y
eficiente. El objeto
á
que tienden
las habitudes es ayudar, facílita,r
J
'perfeccionar nuestras faculta–
d ::.: naturaJe . Los Mbitos 011'cor1 oraJes si consisten en una
c1i.' –
po icíon para hacer algo con el 'cuerpo, como: cantar, tocar un in -'
trumento, &a. los espirituale son una dispo icion para ha el'
algo e piritual, como discurrir, componer,
&a.,
son intelectua]e:
i e
'1'
fieren
al
alma en cuanto conoce; y moral s
i
le refic–
ren en uanto ama
ó
quiere. Pm'a los hábitos corporales
ó
pirituales requiere una dispo icion corporal que con. i
~e
en
una mayor facilidad de mover e las fibra
y
fluidos animales;
cuando no hay cierta di,posicion en el cerebro, como en lo ni