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ENTRETENIMIENTO$
duda forma;-granJes I mperios; pero es par•
que
á
estos vicios no se oponen mas que
otros vicios. Pues de otro modo ¿qua! es la
ventaja de esta usu rpada grandeza? ¿Puede
hacer esta la prosperidad ·de un E stado,
sien~
do
imposi~le
asegurarle sobre un sólido fun–
damento?
Engañada la Política con un bien pasa•
gero,
y
siempre seguido de las contradiccio·
nes mas funestas , ¿ha de sacrificar
á
lo futu–
ro un instante presente? Querido Aristias,.
si
am~is
vuestra patria, los Dioses os preser-.
ven de desearla acaecimientos , que prepa-,,
ren su decadencia ,
y
su ruina.
Por
habeo
querido usurpar el Imperio de
la
Grecia , es·
ta1~os
.J:¡oy los E spartanos ,
y
nosotros e11
vísperas de perder nuestra libertad. La rilo•
deracion de nuestras Ciudades las había pues·
~ó
en estado de rechazar
á
Xerxes
;·y
su arn–
bicion las
va
á
sujetar
á
Philipo. L as grandes
l?rÓvlncias ,
y
las abundantes.dquézas, digan,
lo que quieran. nuestros' Oradores, üo co11-1
tribu yen , ni
á
la felicidad doméstica de nues"
tros Ciudadanos, ni
á
la seguridad de la Re–
pública respecto de los extrangeros. ¿Qué
sirve
á
los l?ersas haber conquistado la Asia'!,
¡Son por ventura mas indepenélien'tes.?¿Go-;
za el vasallo con mas gusto su fortuna desde,
que aumentó el Príncipe monstruosamente la
suya? .Y en.verdad un grai:i\lelmp;riO,esrnuy_
JJ;
de~