-
10-
La filosofía indi::\ es esencia lme nte panteista,
y
su panteísmo,
á
excepción de la
SallldtJ'ª
de
Kapila, la
Vez"seslúka
ele K:\nada
y
otras pro–
testas secundarias
y
parciales, es teogónico
y
místico. E l Sei- Supremo, dicen e l Manou
y
los
Vedas,
ce
es aquél qu e existe por sí.
y
ciue está
en todo porci ue todo está en é l.» <<Nada
co–
mienza, nada concluye,
todo se modifica
y
transforma: la vida y la muerte no so.n 111ás que.
modos
el .:
transformación que cond uce n la mo–
lécula vital desde la planta hasta Brahma
»
\ Atharva Veda) Ya personifir:ado és te, se com–
pone de tres principios e te rn os:. Brahn·1a,
el
ios
creador; Vichnou. dios coi1servador, y Si va, dios
d es tructl?~·
El nnl es, pues! un a ley. divina pre–
sentada, con'lo dice un escrí.tor, en toda su im–
pudicia.
La 'ira insaciable de Siva, á pesar de los ase–
sinatos
y
horribl es sacrificios ci ue se le ofrecen
para calma rla, h11biera <lestruid•J el mundo, si
Vichnou,
torna.nd~)
una forma m:lterial, no
vi–
niera
á
salvarlo por medio de sus distii1tos
avatares
ó
ellcantaúones.
En la últiina de ellas,
despu és de
hab ~ r
representado moi1struos 111a–
rinos , formas
rudirn ~~nt;::irias
de la vida, esfi nges,
animales
y
hombres, Vichnou se encarna en
Chrisna, cuya vida, en la tradici ó n in d ia, es del
todo semejante á la el e Jesús
e<¡
Q~:é
ad mira–
ble intuición de los misterios del cristianismo,
dice Eliphas Leví,
y,
cua nto debe e lla aparecer
extraordi naria, si se piensa que Jos libros sa–
g rados ele la India, ha n sido escritos muchos
siglos antes ºele la era cristiana
i
A
la revelación
de Chrisna sucede
la
ele Bouélha que reune, ar-