..
,
-, GLORIA
24:9
~Como
hoy
,y
m~ftana. ImagfDa~e
lo
~á8 '
rico,
' lo más variado en
trajes"
sombreros,
, adornos,... ¡Jesús, y qué bendición,
de
' Diosl~
-¿L,os,has
~-isto
tú? ' '" " ,
,
,
-'
,-No, porque ' no los"han ;abiel'to... es decir,
han
abi~Eto
un poquito;
p.~ro
allí debe.n de ve–
nir maravillas.
Y
la
sefiorit~
que la acompafia :' ,
e~
tarobién muy guapetona. '
"
-Si
pudiéramos verlas.•.-dijo Teresita
le–
vantándose' con afanosa curiosidad.
-No me comprometas, Teresa. Ahora están
·encerrados la madre y el hijo ' en el cuarto de
éete. Yo me acerqué y les ,oí.
-¿Qué decían, qué decían?
f
~Cosa8
..•
así. ..
no
E;!é
cómo expresártelo,:,
-porque hablaban en alemán ó inglés.o. no
sé.
Bartolo dijo que le parecía inglés. Yo no enten-
día una palabra.
(
-¿P~ro
rentan?
-Nada de eso. Hablaban
al
parecer cari-
ñosamente.
-¿Y
el hijo
~ntró
•..
~
.
-A
poco de llegar la
m~dre.
¡Venía
el
po-
bre con una cara! •.. Pasó toda la noche fuera
de casa.
-Cuéntamelo
á
mí que le sentí entrar de
madrugada en cssa de Lantjgua... -dijo Tere–
Bita
con aniplación.-
Y
llevaba en brazos
á
la
",
"
'.
'
"