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LA CONJURACION
to foe lo que mas dispuso los animas para dar el con–
sulado a Marco Tulio Ciceron : porque hasta enton–
ces lo mas de la Nobleza no le podia oir nonibrar; y
j uzgaba que seria como degradar al consulado ) si un
hombre de su esflra >aunque tan insigne> llegdse a con–
seguirle; pero toda esta altaneriay odio cesaron a vista
del p eligro. Llegado el dia de la eleccionflteron decla–
rados Consules Marco Tidio >y Ca:!Jo Antonio
se)
lo que
aunque al principio sobrecogio a los cot:furados >no por
eso dismi11i!3JD un punto elfltror de Catilina; antes bien
cada dia emprendia nuevas cosas : p1•evenia armas
por Ílalia en los lugm•es oportunos : embiaba a Fésu–
las dinero ) tomado a logro sobre su credito y el de
sus amigos > a un cierto Manlio > en quien recayo
despues el principal peso de la guerra. En este tiem–
po
se dice > que atraxo Catilina a su partido mu–
chas gentes de todas clases )
y
tambien a algunas mtt–
geres >que en su juventud havian soportado inmensos
gastos con la prostitucion de sus cuerpos; y después
que la edadpitso coto a sus ganancias
,,
pero no a su
dit ad consulatum mandandum M.
Tullio Ci eroni. namque antea ple–
raque nobilitas invidia restuabat, et
quasi pollui consulatum credebat, si
eum, quamvis egregius, horno no–
vus adeptus foret. sed , ubi periculum
advenir, invidia, arque superbia post
fuere. lgitur, comitiis habitis, con–
sules declarantur M. Tullius, et C.
Antonius. quod
fa
tum primo popu–
lares conjurationis concusserat. ne–
que tamen Catilinre furor minueba-
tur ; sed in dies plura agitare; arma
per Italiam locis opportunis parare;
pecuniam, sua, aut amicorum fide
sumtam mutuam, Fresulas ad Mal–
lium quemdam portare ; qui postea
prínceps fuit belli faciundi. Ea tem–
pestate plurimos cujusgue generis
homines adscivisse sibi dicitur; mu–
lieres etiam aliquot, qure primo in–
gentis sumtus stupro corporis tolera–
verant: po
t,
ubi retas tantummodo
qurestui , neque luxurire modum fe-