Previous Page  366 / 416 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 366 / 416 Next Page
Page Background

356

Discurso IV.

en

reputacion de tales ,

nada

mas

hicieron que

confirmar

la

doctrina de lo~ aqtiguos. Unas na-,

ciones ~ornaron

tambien. d_e

otras aquellas

ideas

que

le parecieron

propias

á

hermosea_r su espiri...

tual historia , rete.r:iiendo ~u antiguo fundamen–

tal sistem_~ , haciendo de l~s propias,

y

extran–

geras ideas un todo monstruoso.

Así

viven

las

gentes preocupada~ con

un

texido

l)istorial,._

gue

abraza

de .

larga

serie

de

años , confirma-,

do co"n

,la

autoridad de: sus mayores, singula~-.

(~ente. de

los sabios de

cada .

nacion ,

sii:i sospe~

cha_d~ desacierto en~ sus discursos, por ma$

1

disonantes ,

y

por m~s monstruosos_ que parez~.

<tan:

monst_ruosidad

que

no. nace

del -principio

el)_

que obró

la:

~azon , . sino ·

de-

las_extens_ione~;

en:

que obró la libertad

de

la imagiaacion huma–

na.

A

la

luz -,

pues, de su,

razon natural

debe–

mos

atribuir

quant9 con funda.mento -discurrie–

ron los G-entilé.s sobre los Angeles· ,

y

al tras

7.

tocno_

de: ~u

imagi_nacion

todas las ridiculeces,.

que

por

su;

capricho

inventaron,

y

no

á

la.

lec–

<;:ion

d_e

las. Sagradas

Escrituras..

No,

hay

en

esto)

I:TIªs

dificultad -,

que

lo que hallarnos -escrito so~

l?-re

el supremp

objeto ,

y

sus atributos. A ·la,

verdad

dis~urrieron. bien de

un

Dips-,

en quan""'.

to se dexaro9 gu_iar Qe l,as

l,uce~·

ge

la

~az~_n;.

1

,.

y