Angeles,
y
De1nonios.
citando al P. Schot
J
esuí ta , que se veía
eh
Roma
en el
año de
mil seiscientos
y
sesenta
un Templo
dedicado
á
los siete
Angeles
go–
bernadores de los siete Planetas ,
y
que en
un Colegio de su Compañía se les había de–
dicado un altar ,
y
que los nombres de estos
Angeles con emblemas propios
á
caraéteri–
zarlos , se
habían encontrado milagrosamente
en
Sicilia en
una
Iglesia
que allí le_s estaba
consagra_da (
1) ..
2
3
En
quantQ
á
los Angeles custodios de
cada hombre en particular no está menos cla–
ra
la Sagrada Escritura. Jacob expresamente
dice que
el Angel
del. Señor fué su socio ,
y
libertador de los males
que le
amenazaron en
los riesgos de su
vida (
z).
Tobías
el viejo
con–
suela
á
su muger en la
partida
de su hijo , con–
fiando
que
un
Angel
bueno
del
Señor le acom-:–
pafiará '
y
le traerá salvo
á
su
casa ' como
de
hecho se verificó (3). Judith reconoce en el
discurso que
hizo
de su
prodigiosa vi
é1:oria
contra Holofernes ,
que
un Angel
del Señor
le
( 1)
Saverien Diccionair.
univers. Matemat. )
Phfsic. en lapa-–
labra Planeta.
(2)
Genes. cap.48.
v.16.
(3)
Tobite ,ap.5.