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grueso de la gente é hizo formar cuadro á los infantes, colocan–

do á la caballería en dos alas á los costados del cuadro,

y

espe–

ró la carga denodadamente.

El choque de ambas fu erzas se produjo en seguida. El cua•

dro de infantería resistió bizarramente el ataque. El ala dere–

cha que la mandaba Salvañach en persona,

y

los Uran

y

Cor–

rales, rechazaron al enemigo; pero desgraciadamente, la otra

ala, compuesta de la gente de San Salvador no pudo r esistir el

empuje bravío de las caballe rías del gobierno pronunciándose

en completa derrota

y

siendo perseguidos mas de una leg ua del

campo de batalla por un escuadran de caballería.

Despues de esta carga el enemigo se r ehizo inmediatamente

y

se preparaba á traerles otra vez el ataque. Comprendiéndolo

el coronel Salvañach

y

temiendo que su gente no pudiera re–

sistir otra carga, mandó media vuelta

y

marcharon en órden

hácia el pueblo, protegiendo

a

los infantes con los 80 ó 100

hombr es de caballería que le habían quedado. Las fuerzas del

gobierno los persiguieron hasta el mismo pueblo, tiroteándolos

c.:in tantement e; pero al llegar aquí

y

habiéndose acantonado los

infante en varias azoteas próximas á la plaza

y

desmontada la

caballería que ocupó las cuatro boca-calles de la misma, de don–

de empezaron

á

hacerles un fu ego nutrido

á

los enemigos, se con–

tuvieron estos conformándose con establecerles sitio, circundan–

do la plaza á cuatro cuadras de distancia de los cantones.

Todo el dia duró el tiroteo por ambas partes, sin abandonar

ni uno ni otro sus respectivas posiciones; por dos veces reci–

bí ron intimacion d e rendirse los sitiados, rechazándola abso–

lut mente

y

manifestando que preferían morir antes que entre–

gar e á los corifeos del gobi erno. P ero las municiones se les

habían concluido; no les quedaba otro r ecurso que ocurrir á

lo alrnac ne , como a i lo hicieron

y

recoj er toda la pólvora

y

bala qu

ncontraban· la resi tencia, pu es, se hacia casi impo-

ib l ; per

in mbarao nadie pen aba en rendir e: ni nadie

p n ' ó iqui ra en pr oponer semejante co a. Qué hacer en este

tranc ? o había ma que e perar la noche

y

ali era por donde

alit:ra ab rir epa o por entre el enemigo, y a i se r esolvió por

t d

on l mayor ntn ia mo.

Ll ada la noche, e reconcentr aron en la plaza todas

di poniendo l Coronel alvañach que e llamase

del enemiao obre una boca-calle, haciendo una

fu ileri · que n l in tan te, formada en

el

centro