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I M P E
ft
I O
S O C I A L I S T A D E
L O S
I N ·C A S
que
los alentaban con sus gritos, exaltando
a
los vene·edo–
res
y
censurando a los retardatarios. ·En seguida, div-ididos
en dos ·Cá.Il1POS, combatían unos cqntra otros con tanto ar–
dor, que a·Ígunos de entre ell·os resultaban a
v.ec·es ·he-rídos
o muertos. Los ej-ercicios fisicos ·terminaban ·con la iucha
y
el tiro al arco o a la· honda. Las
prueb~
moral.asvenían
después: el candidato debía ' permanec·er <;liez noches s·egui–
das de centinela, recibir
golp.essin proferir una queja, per–
manecer impasible euando un jefe hacía ádemán de rom ...
perle el .
cran.eocon ·una maza o piri·charle la cara · co-n.. la
punta de una lanza. Tenía que ·· probar, ·en fin, s,u.s conoci–
mi'ent~s
técnic:os, fabricando un ar·co, una honda
y .
un par
d·e sandalias
.A-1--•------
El aspir n
manifes-
taba algun
f
o~
nosamente
eliminado;
1
sido juzgado
como instr
·e na fu·erza de
resistencia
. , ,e a
· .i o po:r el inca,
que .le perf aba en persa a el lóbu o de
las
orejas,. en el
curso d·e una magnifica c·eremonia. Desde
,ese
mom·ento, el
jov·en.
t~nia
d·erecho a llevar
~aretes
enormes, ·cuya dimen-·
sión :era proporcional
-a
su
ra~go
·especial. .He ahí . por qué
lQs españoles llamaban .or·ejones
.a
los nobles .peruanos
(-2~
El carácter que esta.enseñanza confería era .común a la
.
.
..
(1)
Garcilaso, "Comentarios"t lib.
VI,
cap.
25.-
Louis Baudin,
"La
formatión d·e l'élite et l'enseignement de l'H'istotre dans l'Empire _ des
Inka". ''Revue des Etudes Histortques",
abril
19~7 .
· .
,
·
·
(2) Rouma anota · que ·-tos dioses
~aponeses
de la ;feli-cidad.... ae dis–
tlnguen
por el
de.sa.rrollo ex81gerado del lóbulo de las oreJas, , obServa pión·
que el prolba·ble origen asiático de los indios 1hace parttculannente
in–
teresante
( ..
Lf:!- civilisation des Incas",
p.
25 ,
n.
2).
La '"prueba; de
que
esta
e~tUJ!n'bre
era ·
~nterior
a
los inoas es que
~·1
heCih?
de
_-nevar ·
&retes
era
aoo:rdaq.oa
-c!er~as.
tribus,
a
titulo d·e recompensa,
p~r
·'ejemplo,
~n
el
valle del Yu-cay (Joyce,
"South-American Archqeology"?
p:
~~9),
y _
entre
los
chHx~has
de Colombia (Piedrahita, ."Historia general
de
las ·
conquistas·
del
Nuevo
Reyno
de ·Gra.nada". Amberes,
1688.
Primera
'¡párte,
Hwo
lii,
cap.
4).
Igualmente
en
México, los
jefes
da-bai).·
aretes
á,
•los
gú erreros
que
se
distinguían en
los
combates
(S.
Blondei, !
' 'Recher ch es sur les
bijoux des peuples prtmtttts",
'Paria,
1876,
p .
38) . ·
131-