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ofi.ciaban por turno durant·e ·Cierto número de días. Final- ·

1

mente, en un gra:do inferior de la jerarquía, ·estaban los

adivinos, que

perman~cian

·en los v·estíbulos doe los templos,

y

los guardianes de los lugares sagrados (1).

Igualmente joerar•quizadas, ·como lo hemos visto,. estaban

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tij

eres del inca. La soberana en título, la

coya,

llevaba

en las ceremonias oficiales un vestido casi tan magnifico

:como. ·el de

su

·esposo; iba cubierta .con una gran capa de

colores

di~·~rsos,

del tejido más fino, pr·endida por un gran

alfiler de oro cincelado,

y

su cabeza ·estaba adornada de

una diadema de oro

y

de flores. Nadie debía aproximarse.

.a·

e.Ua

sin prosternarse

y

nadie debía mirarla de frente; un

gran número de servidor:es la rodeaba,

y,

para ·evitarle todo

contacto ·c..:p. ·

1

~lo,

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t·endían

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tierra ant·e ·ella alfom-

bra,s que eran retiradas d s

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Estaban

di

idid:a

,

n seis ·categorías, según su ·clase social:

la ·primera ·estaba formada por las hijas de grandes persona–

j.~s;

la segunda ·COmprendía las hijas de dignatarios menos

importantes,

y

éstas hilaban

y

tejian para ·el inca; en ia

·

(1)

GaTcilaso, "·Comentari.o.s", .lib.

2,

cap.

9; li.b. 5,

cap.

8.-

Markham,

·

11

The incas oj Peru",

cap.

8.-,

Arriaga, "Extirpación de la idolatría",

pas·

sim.

Ciertos sacerdotes esta:ban encargados de la conservación de los

templos ; otros, de los sacrificios; quizá existían congregaciones ;religio–

sas

y

ermitas ("Relación Anónima", en "Tres Relacio

nes ... ", p

.

172) .

Habí?- pa:ra el clero un moodo especial

de

;reclutamiento:

ent:rab.an

al s·er–

vicio de los templos todos los individuos que presentab

an algún c

arácter

sing

ular ,

sea ·en su pe:rsona

(epilépticos), sea en razón de circunstan–

cias

p.ar

t iculares de su nacimiento o de su vida (niños que habían sa–

cad

o

·pr~ero

Lo,:;

pies al nacer o que habían sido paridos durante una

tormenta; og·emelos, estropeados d·e .nacimiento, indios tocados por ·el ra–

yo

s in habea" sido matados).

Se

encuentra en esto

la

.concepción que

forma la base del culto de los

huaca

d·e que hemos hablado: la divini–

zación de las anomalías.

(2)

Morúa, "Historia", lib.

1,

p.

39, 45.-

Markha.m,

"The Incas of

Peru"·,

cap 8.

-134-