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~bres,
Speciosus
lorn1a
prre Elii
ho111i1111im
[1] ..
No
queren1os
con esto decir
(]ne
la
obra
de
Iluanca sea tan perfecta y
suhli1ne
como
las
.tela~
de Van Dyck, ni
Sl{]Uiera
que pudiera hacerse nn
parangón
entre
~1
Señor del Viicanota
y
}al~risi6,n
del Cristo de Madrid; pero
si
que
hay
un.a influen–
cia
de
la
escuela noble
y
suave de \tan
[)yck
en
la
· magestad serena
y
en
la
belleza
rle facciones,
y
en la
dulzura
de los ojos
de
la figura austera
y
es-
cuálida del
Cristo
ae
I-Iuan·ca.
·
,.!J
Y
es curiC?so
aqui anotar
algunos
detalles..
1~1
Cristo de llnanca
tiene
de
alto un n1etro· ochenº
·ta
y
do.s
ce·ntírnetros.
..-\
prin1eta
vista
¡)a
rece
que los.
brazos
caidos fueran más largos
que
lo
natural,
' pero
ohseryando
con.
aténcion,
se vé
que
aquello
es
únican1ente efecto de óptie'a
y
que
soil
proporcionados a
la altura del Señor.
Contribu–
ye
a . esta
equivocación
la postura inclinada de
Jesús.
.
No es pués la
pintura de Huanea
una obra
acaba del pincel: tal
Yez
en los :\1 useos de Europa
. no
pasaría de ser un
cuadro
n1ediocre, pero
para
la escuela cuzqueña de su tiempo es una obra
maestra;
una
obra que tiene tanto de sentimiento
y
vida, tanto de
n1isticisn10
y
an1orr
que
al mirar
110
se contienen las lágrimas en los ojos, ni se, que-
da
frío el corazónº
.
Nosotros
creemos
pues
que
la
pintura de
·Huanca fué mandada
hacer por los Mercedarios,
propietarios de
H~1anea,
según los datos de
Q'uis~
pe
y
po~o
después de la segunda aparición. _
Para
explicar la influencia de
v ·an
fJyck supo–
ne1no~
que el artista.
encargarlo
de-
la
obra
de
' IIuanca, estaría recien llegado de Flandes,. donde
[11 A
pesar
de no ser_}os;
C·ristos
lafY
pinnuras m:l.s
admirahies der
@orr,ipa:ñero de ..JacQbo Jordaens son ohras acabadas sus Cristos Lou–
vrP; de Mueich
y
Ambel'es. · El autor se
basa
en ellos
para
hacer su
comparaci
6n conlos
ra8~;os
generales de la pintura de Buane:.'iJ
y
los
¡>erfiles del
vost.rode
Jesi'ut.