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(65) El virrey del Perú, don Francisco de Toledo, dice
que
«
gon9alo de Abreu procedio contra el dicho don hie–
ronirno de cabrera sobre dezir que se quisso al9ar e reve–
lar coi tra el servicio de su magestacl en aquella tierra
y
le mando cortar la cabeya
y
se la corto ... »
(Op.,
pág . 53).
Por su parte, el Cabildo de Santiago nos cuenta que
«entró en estas provincias Gonyalo de Abreu -de Figue–
roa
y
luego como entró prendió al dicho _don
J
eroni–
mo que estava en la
dio.hapoblaoion de Cordova y traido
a esta ciudad [de Santiago
J
lo tuvo preso hasta que al fin
de su resydenoia dió fin de su vida ... »
(Op.
II, pág. 255.)
Finalmente, uno de los
cargos
que hizo Hernando de
Lerma a su antecesor Abren, es que viniendo éste por
gobernador a estas provincias, «entro en ellas con mano
armada poniendo mal nombre al dicho don geronimo [de
Cabrera] en Jas cosas del servicio de su magestad publi–
cando enemistad contra el
y
que lo auia de destruir
y
ma,tar y a viendole deserrajado sus caxas
y
tomado sus
bienes en esta ciudad [de Santiago
J
le fue a buscar a la
dicha ciudad de cordoba donde estava sirviendo asuma–
gestad
y
siendo ... del dicho don geronimo muy bien rre–
cibido ... consintio que vn sebastian perez su maese de
canpo le arrastrase su guion por el suelo y luego le pren–
dio sin conocimiento de causa
y
le enbio asi preso a esta
ciudad donde procedio contra el en su rresidencia ... con
mucha pasion y demasiada molestia ... dando lugar a que
padec:íese eoesidad de comida y no se le diese de la qual
apretado vino a terminos que muchas veces comia en la
prision
1note
de trigo y maiz cocido» (L
~RMA,
op.
II,
pág. 140-141). A lo cual agrega, que una vez en Santiago,
abrió juicio Gonzalo de Abreu, contra Cabrera,
y
proce–
Q.iendo arbitrariamente, no obstante estar recusado,
«ha·