Table of Contents Table of Contents
Previous Page  120 / 174 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 120 / 174 Next Page
Page Background

- 100 -

ron ser algunos de los jesuitas expulsa,.

dos por los españoles de virreynato del

Río de la Plata, llevaban una negra vieja,

tal vez alguna esclava de origen africa–

no.

La negra, enfermó de gravedad y cre–

yéndola próxima a morir, fué abandona–

da entre los indios, para quienes una

persona de piel tan obscura, la primera

de esta raza que veían en su vida, era

un ser distinto del res to de la humani–

dad, un ser que debía encarnar algo de

diabólico: debía ser la encarnación de ese

Diablo, de quien los misioneros tanto ha–

bíanles contado.

Pero la muerte respetó por esa vez a

la enferma; sanó y lejos áe ser ultima–

da por los indígenas, f ué para estos por

algún tiempo la curandera de la tribu, la

que quitaba las pequeñas dolencias, apli–

cando los conocimientos de medicina que

había adquirido en su larga vida de es–

clavitud entre los jesuitas.

Un día, coincidfp la desaparición de