239 / 254
-235-
dados:
á
esto te insta la caridad ingeniosa, viva
y
activa. I)irigid Señora nuestras
v.i~·itas :
haced
que sean ediíicativas
y
piadosa!~,
librándonos
de las que son escandalosa s , p e liRrosas
y
~os-
. pechosas, para mdnteuer así la sociedad huma–
lJél
ilesa
y
libre de todo conta¡:do que la vicie:
inf:P-ndenos el amor é inclinación al buen ejem ·
plo·y
agradar
á
nuestro S eñ or Jesucristo qne
vive
y
reina por 'Ios sigl-os de los siglos . Amén.
Oración-para el
quinto
día;
Excelentísima·· Seflora Maria · Santísima del
Buen
Sucesó~
ql:Íe·. d ando fin á tu sagrada es·
t.acióu
y
dulces af<:ries; Ilegaste á -Hebró n, ciu·
.dad sacerdotal,
y
dirigié ndote á la casa de Za ·
carías, te salió al encuentro tu afo rtunada Pri-
ma á recibirte,
y
adelantándote á saludarla, de<;–
pegaste eso s dulces labios, más finos que la
grana.
El niño Juan que se h a llaba en la
OS ·
cúridad, que le causaba la culpa oríginal,se vió
repentinamente iluminado con una celestial
luz,
y
perfecto conocimiento de la Mages tad
y
grandeza del Hijo
y
la Madre, que le hacían
tanto honQr:
y
ya
que no podía hablar
desd~
a–
quella oculta prisión del materno albergue,
solo os .adoró dando un prodigioso salto en el
interior de aquel claustro materno en señal del
más profundo respeto
y
singular gozo.
¡Qué
torren.tede gracias derrama el cielo sobre vues–
tra persona al oír aquella melodiosa voz de la
doncella mas agraciada
y
hermosa que deseaba
el Esposo sonase en sus castos oídos; voz aní ·
macla por el Señor, que está encerrado en tu
purísimo vientre: voz que al sonar por el aire,
rompe las cadenas de la culpa original, mejor