-23-
La
viuda
Cuando
á
su
consorte
pierde
triste
tortolil-l
amani."e,
cn
sus
ansias tropezando
corre, vuela, torna
i
parte.
Sin sociL'go discursiva
cxéÍ.111ina
todo
el
parqu~· ,
110
reservando
(t
su YÍsta
tronco,
planta, rama<)
sauce.
Perdida
ya
la esperanza,
1 el corazón palpitante,
Jlora
sin intermisión
fuentes,
río~,
golfos, mares.
·.\si vivo
yo (
j
ay
ele mi!)
d<::~dc
aquel funesto instante,
que
te perdí por desgracia,
dukc h::chizo, encanto arnahle.
Lloro,
pero sin
consuelo;
porque es mi
pena tan
grande,
que
solo
re8piro triste
penas,
sustos,
ansias, ayes.
La
·ncmc;ria me
maltrn.tn.cuando
á
tu adorada imagen
siL'mprc me
la
representa
muerta flor,
helado
jaspe.