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PREHISTOIGA ECt:..
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Pacífico, form ando de todas las nacione
que habitaban
desde Trujillo hasta Portoviejo un solo imperio.
E ta
raza del litoral era, pue , distinta d
la raza qui chua
y
11
civilización era también diver a.
Creemos que investi gaciones arqu eológicas má afor–
tun adas qu e las nu estras, harán, con el ti empo, conocer
mej or á los Mayas de Man abí, de Sant:i El ena y de la
Puná; y nos atrevemos á asegurar, que, cuando sea n
más prolij amente estudiadas h s naciones indígenas a nti–
guas de Centro Am érica,
y
cuando se haya n investigado
los territorios por ellas habitados, y descubi erto mayo r
número de restos arqueológicos entonces e pondrán de
manifiesto las relaciones etnográfi cas, que ahora conj -
turamos que existen entre los pobladore de
entro Amé–
rica y las parcialidades ecuatorianas, á quienes las hemo3
apellidado Mayas, porque opinamo
que procedían de
aquella raza.
4
Los aborí genes, que poblaban las costas de la pro–
vincia de E smeraldas, eran idé nticos á los que habitaban
el Istmo de P anamá; y, sin duda, pertenecían á la misma
raza.
4
Aunque se han hecho ya alguna
publicaciones acerca de la arqueologfa
de Nicaragua, de Costa Rica y de Guatemala; con todo, podemos asegurar que
todavía no ha a\'anzado mucho la Prehistoria centro - americana, Ja cual, andan–
do el tiempo, llegará á ser indudablemente de trascendental importancia para
el conocimiento de las antiguas razas americanns. -
os apro,recharemos de esta
ocasión para hacer una reflexión en defensa de nue tra
Jfisloria
Gmerat
rle la
Rrp1íblica
rld
Ecuador:
tratando de las tribus antiguas, dijimo., en nuestro tomo
primero y lo repetimos en nuestro Atlas arqueológico, que las parcialidades ind(–
genas que habitaban en la co ta de Manabí, pertenecían á Ja raza maya; que lo
Cañaris procedían de Ja raza quiché, y que los Quitos eran oriundos de Ja raza
caribe: e nos objetó que los Cañari y los indio de Manta y de la Puná y los
Quito
traían su origen de un solo tronco etnográfico,
y
que éste era el maya -
quiché;,
y
así en el terrilorio ecuatoriano no había más que mayas - quichés y no
caribe .
En cuanto á los Cañaris
y
á los de Manta
y
de Ja Puná, no tenemos difi–
cultad ninguna para admitir que pertenecían al tronco maya - quiché: en cuanto
á
los Quitos, con fe amos que los argumentos que
.e han opuesto á nuestra
conjetura no desvirtúan, en nuestro juicio, las razones en que la apoyamos. -
R1'jlerlo1io Sah-arlore1io. -
('I'omo octavo. -
úmero primero. -
San Salvador. -
i893). -
El artfculo es del Señor Barbereaa. -
Las lenguas Maya y Quiché
pertt:necen á un mismo lronco lingiiístico,
y
proceden de un mismo origen etao–
gráfico: si nuestra conjetura sobre el origen de los Cañaris no es equivocada,
claro es que entre la lengua que hablaban éstos y la que hablaban las tribus de
la co ta de l\Ianabí debe haber emejanza, porque uno y otros eran oriundos de
una misma raza, aunque pertenecían á familias di tinta ·. Ademá , Jos Cañaris
eran muy antiguos en el Azuay, y las tribu que poblaban
Ianta y anta Elena
y
Ja Puná e puede decir que eran modernas en el litoral ecuatoriano.
BALDI. -Atlas etnográfico del Globo.-(Parte hi tórica.-Capítulo éptimo).
ÜRozco
Y
BERRA. -
Geograffa de h1s lenguas y Carta et¡iográfica de
l'lft!–
jico. -
Iéjico,
1 86~.
P1ME TEL. -
Cuadro descripti''º
y
comparativo de las lenguas in<lígena.
tle J,Iéjico. -
(Tomo tercero). - Méjico, 1875.