237 / 544
221
Y en encontrando con el saltó en la nao capita_na,
en donde Je dió cuenta de todo lo que passaua y de
como los pané\._menses es tauan puestos en arma
con presupues to y determinacion que no lo auian
de dexar entrar en la cibdad, ni menos saltar en el
puerto; y assi le dixo lo qu e los sec r etos affic iona–
dos de Gorn;alo Pic;arro le au ian embiado a dezir.
Oyendo Hinojosa es tas cosas mando
á
los suyos
aperceb irse pa r a
la,
batall a venidera y poner en
horden y concierto los nauios apr estando la arti–
llería y arcabuzer ia,
y
mando subir a (1) las gauias
muchos guijarros
y
otras armas a rrojadiza para
combatir los ná.uios que estauan en el puerto. Qcho
di as andados del mes de Otubre de 15-1.5 años lle–
go Pedro Alonso de Hinojo a a l puerto de Panama
con doce nauios y a l pie de quatroci entos y veinte
arcabuzeros, que mas de la mitad dellos eran pi–
queros. Luego como los cibdadanos supieron de
su venida se pussieron todos en arma·y prestamen–
te recogieron los soldados que estauan en los na–
uios, antes qu e Pedro Alonso de Hinojo a llegasse
"
al puerto, que aun veni a en a lta mar, y los pussie-
ron debaxo de vanderas. Serian todos estos hom–
bres has ta quinientos y cinquenta entre vezinos,
mercaderes y soldados, y puestos a punto de gue–
rra se fueron hazia el puerto par a deffender que
Hinojosa y los suyos no saltassen en ti erra ; mas,
en fin, el entro y se apode ro de los na uios s in
nin–
guna r esistencia, porque estauan sin deffens ion.
Muchos soldados de los panamenses, como eran
(1)
Tachado:
lps 11auios.