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dia, para que los perdonasse antes que Carauajal

boluiesse por ellos para los ahorcar. Tambien en–

tendieron en esto los Reuerendissimos obi pos y

el regente y los officiales

Su Ma:=;estad con el

Contador general y otros muchos caualleros ami–

gos de los presos, los quales todos les suplicaron

con muchas ymportunaciones y ruegos diessen la

prouission,

[y]

aunque fue -contra la voluntad de–

llos, la dieron, para que los presos escapassen con

la vidas, pues eran muchos y de los principales

que auia en la tierra. Viendo los Oydores sta tan

grande y vrgente necesidad que a los presos ocu–

rria, y porque no fuesseµ muertos por auerse ve–

nido a seruir a Su Magestad, y porque no des tru–

yessen la cibdad, y por euitar estos daños y otros

mayores que se podrian recrescer, dieron con

breuedad Ía

p~ouission.

El prime ro que firmo la

prouission fue el Oydor Cepeda, y luego 1 Oydor

Texada, y dandola al Oy dor <;arate para que la

firmase es tuu o dudando si lo haría, o no, mas al

cabo, tomando la pluma en la mano y la proui–

ssion hizo vna cruz encima de donde auia de fir–

mar y dixo.

Yo juro a Dios

a esta señal de

cruz

y a las palabras de los Santos E_uange–

lios donde mas larganiente e tan escriptos) que

firmo esta prouissz"o.n de 111:iedo y contra toda 11ii

voluntad, porque no me maten)y

(1)

a los caualle–

ros que estan presos en aquella careel) pues no

tienen culpa/

y luego pidio a los pressentes le

fuessen testigos de todo lo que auia dicho, y con

( J)

Ms.

porque.