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rate no la quiso firmar, escusandose
in
ucho sobre
~1
casso, como arriba quesJ.a dicho, aunque fueron
a su casa solamente para que la firmasse.
y
alli
todos tres Oydores le importunaron, rogandole
mucho lo hiziesse con animo y sin rezelo como del
se esperaua, pues
~abia
que era justicia y se hazia
gran seruicio a Dios
y
a Su Magestad por obuiar
tantos males como de cada dia se hazian, y e] no
lo quiso hazer, y por esso lo dexaron, que no hi–
zieron casso del. Martin de Robles leyo la pro–
uission y
balló
que estaua conforme a como el lo
desseaua, porque si en algun' tiempo le dixessen
algo se pudiesse con _ella descargar diziendo que
Ja Real Audiencia se lo auia mandado,
.Y
con
esto se deshizo la consulta y cada vno se fue
~
su
posada a hazer
Lo
que mas le
conu~nia.
Y tomo
esta prision se uviesse acordado debax0 de falsa
opinion-y engañosa de justicia, por autoridad de la
Real Audiencia, atribuyeron que el Visorrey auia
hecho muchos delictos y grandes desatjnos, no mi–
rando que todo lo que hazia era por seruir en ello
a Su Magestad. Y assi justificaron su causa dando
a entender a Martín de Robles y a los cibdadanós
y moradores de la cibdad, diziendo que era justicia
recta la que haziarr, porque era gran seruicio de
Dios
y
de Su Magestad, y assi lo publicaron dizien–
do que tenían poder para prende r, á l Yisorrey, lo
qual creyeron algunos, .
y
otros no, aunque otros
maliciosamente
~o
dissimularon. En fin, al fin, los
tres Oydores comenc;:aron luego de buscar fabor
y
ayuda de los vezinos y amigos nueuos, de los mas
valerosos y ricos hombres que auia en la cibdad,
.
...
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