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DE LA REVOL CIO DE l 'GLATERRA.
175
y olo
co~atia
al rey; confiaba solo en la cámara baja , y sin embargo
no queria mal á los lore
i
obedecia
á
la co lumbres arraigadas
y
á las
nueva exigencia , no meditaba, solo deseaba una reforma legal, y
n~da rna .
Agitado de
te modo por di posiciones onlrnria , arrogante
é
in-
ierto, fanático y moderado á un tiempo, no contaba siquiera el partido
presbit riano con jefe salido de su seno y que e tuvie en onforme con
u principios; antes por el contrario marchaba en pos de los reformado–
res politico , p1·imeros intérprete y verdaderos representante del partido
nacional. u alianza le era natural
y
neoe aria : natural, porque ambos
querían reformar el gobierno
y
no abolirle; nece aria, porque e taba en
pose ion del poder,
y
lo con ervaba por la superioridad de su rango, de
sus riquezas y de su luces : ventajas que no negaban lo mas ardientes
presbiterianos. Pero si buscaban los reformadora pol!Li os y aun am–
praban el apoyo de los sectarios, no por e to p osaban como olios en
punto á la igle ia; un episcopado moderado les convenia mas, de modo
que casi
á.
de pe ho ele su voluntad servian á aqu llos. De este modo la
union de ambos partido no era completa ni sincera sino en polilica,
donde ninguno de los do se mostraba afei-rado en principios.
Fuera de esto, en
16
i5,
estaba con umada la reforma polflica, legal
á
lo menos ; no subsistian ya los abusos ; se habian sancionado todas la
leyes que se juzgaban necesarias, y modiücado, como se supo, las in ti–
tucione : nada faltaba á la obra que querian de mancomun elevar aque–
llos dos partidos: Pero la revolucion religiosa babia apenas principiado,
y
la politica amenazaba correr los riesgos de la exaltacion : era por lo
tanto llegada la hora en que se debian p'atentizar los vicio orgáni os
de aquella alianza. ada dia se
v~ia
prec1 ado el partido dominante
á
ontrade ·ir e; lo que solicitaba en la iglesia lo neg·aba n polflí a; on–
tra
1
s obi po invocaba la pa iones democráticas, y ontra los na iente
republicano la tendencia monárqui as
ó
aristocráti as. Era un espec–
táculo singular ver demolir on una mano y sostener con otra, predi ar
innovaciones y anatematizar innovadores, ser temerario y
Llmido~
reLelde
dé pota
á
la vez, perseguir on la libertad los pi opales, y on et
pod r
á
lo ind p•ndienLes.
Abantlonábanle
ó
le comprometían tambien mucho de sus j fes.
Al–
guno , orno Rud ard, se retiraban de la arena,
ó
olo e pr sentaban
de ti mpo n tiemp , ma .para protestar que para obrar. Lro meno
honrn lo , om
aint John,
ó
ma~
perseverante
osado orno Pym,