Prólogo..
LXV
·.Española, de
do~de ~artage~a
dependia,
á
proveer por
juez· de residencia de su gobernador al ·fiscal licynciado .
Dor.arites.
Y
no · habiendo pQdido
cumplirs~
· aquel ·
acuerd.o, pórque
~l
fiscal
~..-- ahogó
con todos sus cria- ·
dos
y
c?mitiva
á ..
l~
boca del
R.ioGrande·de la Magda- ··; · ..
lena, la Audieri'cia confió.
ra
misma comision
.á
uno de
sús~·
oidores, el licenciado Juan de Vadillo, muy pa–
ri.ente del otro ·Vadillo que gobe_rnó
á
Santa :Lviarta
con don Pedro de H eredia por teniente, allá por los
.
1·
.
.
años de 1527
á·
I
529; cuya ci:cunstanéia y la de car-
tearse cqmo buenos
~tnigos
.el
ju~z.
y
el
encatis~do,
h,i-.
cieron que éste esperase más qien con· alegría' q\le con ·
'
.
.
pen~
la rt:sidencia. Peró
lo~
·modos amigables·qe
~.ad~
-
· llo no eran otra cosa que
disimu~o
de .enconado rencor
col}tra don Pedro,-·segun se cuenta,' porque dejó'
mó-·
rir ' de 'miseria y
tra~ajos
en las
pritner~s
conqll;istas
de·Nueya·
~Órnbardía,
á
Clos· sobrinos
del
oidor, aunque
se
ign~~a
si aquel
tu~o
la
c~lpa .
con verdad
ó
só~o
la
rpala
~uerte
de 'los sob16nos. Como fuese, ello es que
~l
.
.
.
.
sesenta .dias tuvo aplicado ·al
r~stro
. .Terminac\a con .toda
felicida~
la.
.peregrina cura" Herédia no
s~segó
buscando un cumplido desqu ite
y
lo
encontr6 por fin en la muerte dada con ma'no propia á
tr.esde sus agre–
sor~s,. ~no
de los cuales era hermano ó muy deudo
d~
Ludueña. Para
ev~tar
e~cándalos
y
un ma·l remate de proceso, habiéndosele dfrecido oportuna
oc~sion
·de pasará fas Indias,
. d~jando
en Madrid mujer
y
dos hijos, 4n-
. . tonio
y
Juan, .se embarcó para la Española en compañía. de su herman·o
mayor
dos
Alons~
..