La Guerra de Quito.
que Pompeyo solamente peleaba por
el
bien comun; lo
cual, sabe Dios, si como fué vencido venciera, ques lo
que hiciera.
Y ansí, en el reyno del .Perú, extendida la fama de
que los del cabildo y más vecinos habian nombrado á
Gonzalo Pizarra por procurador, creyendo quél no
quisiera más de mostrarse por todos, alegráronse, y
acudían, los que le acudieron, y teniendo más tiempo
que tuvo Pompeyo para aclarar la intencion que en
el
tiránico pecho tenia, lo mostró. ¡Dichosos aquellos que
estaban en el reyno
(a)
y pudieron con industria dejar
de seguir las banderas deste tirano! Mas, ¿qué hablo
yo, pues estando metidos en los espesos cañaverales
dé Quimbayá
(b),
hubo este furor de extenderse hasta
allá
y
darnos á entender las guerras civiles cuan crue–
les son?
(a)
Es de advertir' que Cieza llama
á
veces por antonomasia
el re.JnO
al Nuevo Reino de Granada.
(b)
Alude
á
su residencia en Cartag o,
capit.ilde la provineia da
Quimbayá, por los años de 1546 y 47 . Dicha provincia' era notable entre
todas las de Popayan p0r sus grandes y esp esos
hJtamales
ó
cañaverales,
formados por la huama ó guadua
ó
caña brava.
(Guadua a'Jfgustifolia)
(V.
Primera tarte de la Crónica dtl Perú,
caps.
xx1v
y
xxv.)