CAPÍTULO FINAL
457
de los principales autores de su prision
y
visitador del
Tribunal de la Inquisicion; en el segundo, dice que le con–
vidaron los Inquisidores a que se al9ase con ese reyno; en
el tercero, y otro que está con él, hace relacion de su de–
~endencia,
partes, estudios y servicios, oponiéndose a los
cargos que le hizo el Tribunal, con raros y heréticos ar–
gumentos, tratando de ignorantes a los Inquisidores, con–
tando muy por menor la vida y costumbres de cada uno,
forma en que adquirieron las
pla~as,
nüserable tratamien–
to que se hace a los presos,
y
que las haciendas secresta–
das a mas de sesenta familias, que aprehendió el Tribunal
los años pasados, con pretesto de judaísmo, importaron
mas de un millon,
y
le repartieron entre ellos,
y
que tratan
y contratan con la cantidad que a cada uno le cup0,
y
que
atendiendo Dios Nuestro Seflor a la defensa de nuestra
sancta fee católica, le habia mandado os intimase lo refe–
rido y que se formase una junta de diferentes personas,
donde, con noticia de lo referido, se resolviese el prender
~los
Inquisidores y demas ministros de aquel Tribunal,
confiscarles sus bienes
y
proceder luego al castigo que to–
dos merecían: referís, asimismo, que el primer dia de pas–
qua de Navidad, amanecieron fijados en la iglesia Cate–
dral de esa ciudad y de otras partes, algunos papeles deste
hombre contra la Inquisicion, y que aunque causó alboro–
to este caso, como luego el Tribunal os dió quenta de la
fuga
y
se publicó edicto en su nombre y bando· en el mio
para que nadie los ocultase, se apaciguó todo;
y
el tercer
dia de pasqua, pareció don Lombardo en casa de un pobre
hombre, que sin saber quién era, le habia recogido, y Die–
go Pinto pareció en otro parage, y que ambos fueron res–
tituidos a la cárcel, y que teniendo el Tribunal noticia de
que los papeles referidos habían llegado a vuestras manos
(aunque no de las particularidades que contenían) don
Juan de Mañozca, en nombre del Tribunal, os insinuó
importaba recoger todos los que este hombre hubiese sem–
brado; pero, como demas de algunos casos pertenecientes
a la fee, tocaban otros que miran a sus particulares ha–
ciendas, rehusasteis el dar todos los papeles, enviando sola–
mente el que trata de haberle soltado de la prision. El Ar–
zobispo difunto, con ánimo de poner los otros tres en mis