Previous Page  263 / 382 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 263 / 382 Next Page
Page Background

0APITULO X

241

nielo yo aviso de que en la ciudad del Cuzco andavan en..

contrados, el corregidor de ella y don Juan de Abendaño,

contador de la real hacienda de Vuestra Ma.gestad,

y

los

amigos y deudos de la una

y

otra parte, y que habían

venjdo a las manos, de manera que puso en mucho cuida–

do la quietud de esa ciudad, y porque la Audiencia real

de ésta despachaba un juez sobre ello, el qual no podia

llegar con

la.

vrevedacl que convenia,

y

era necesario pre–

venir con tiempo que no se volviessen a encontrar, mandé

despaehar un chasque muy de priessa, con provision para

que un vecino del Cuzco encarcelassc en sus casas a los .

susodichos, como lo refiero a Vuestra J\iagestad en

la

carta de gobierno temporal, y como este fué chasque es–

traordinario y despachado a la ligera, no se publicó ni

entendió su partida, y savido por los dichos ynquisidores,

llamaron al chasquero y le tuvieron presso, y maltrataron,

porque habia despachado el dicho chasque, sin darles

quenta de ello,

y

esperar los pliegos del Sancto Oficio, co–

mo se refiere en una relacion que de1lo embio, sabiendo que

siempre que es necesario para negocios de el Sancto Oficio

despachar alguno trasordinario se le da, y no solo a ellos,

pero a sus eomisarios y ministros, fuera de esta ciudad, a

los quales se lo dan los corregidores

y

otras justicias, lue–

go que lo piden, sin otra diligencia.

11Ha llegado a tan grande extremo el querer los ynqui–

sidores entremeterse y entender en los negocios del go–

bierno de este reyno, y diversos de los que les tocan, que

para que nada se les esconda, habiendo ellos prendido, la

ciudad por cárcel, a Juan Bello, a quien truje por mi se–

eretario de cartas, y despues le nombré aquí por de la go–

bernacion, juntamente con Melchor Perez de Maridueña,

por estar el dicho oficio vaco por alguna causa, que, como

se trata en el Sancto Officio, yo no he sabido qual es-, y co–

mo entendían que los negocios de mas secreto e impor–

tancia al servicio de Vuestra Magestad, los despachava

ante él, por tener ele él a la sazon mucha confianza; supe

que los dichos ynquisidores, con ocasion de la dicha su

causa, le llamaban y preguntavan cosas y negocios de mi

cargo y secreto,

y

que importava al servicio de Vuestra

~iagestad

tenerlo, y aunque no sé cierto que le ayan pe-

16